El material elegido para los acabados es un caucho provisto de una capa sintética, de un centímetro de grosor aproximadamente. Se ha optado por el color azul claro para la pista central, y un tono algo más oscuro para los márgenes. En cuanto a los campos de juego, tan solo se delimitarán tres: fútbol sala, balonmano y baloncesto. En el centro se sobreimpresionará el escudo de Guardo. Las actuaciones en el complejo deportivo de San Miguel no solo se centrarán en el pabellón, sino que también se acometerán varias reformas en las pistas exteriores, concretamente en las de tenis.