No lo son pero se parecen. El grupo Smoking Stones, una banda tributo a los legendarios The Rolling Stones, calificada como una de las mejores, dio ayer el pego en el parque del Salón. No solo por la voz de su cantante, Sergio Ortiz en el papel del incansable Mick Jagger, sino también por la apariencia, el ritmo, los movimientos.

Cientos de palentinos esperaban escuchar en directo los temas de Sus Satánicas Majestades y los que ayer se acercaron al Parque del Salón no se fueron defraudados, ya que la banda tributo realizó un repaso por los temas más conocidos de esta la banda de rock que lleva más de 50 años sobre los escenarios.

En su web se puede leer que los integrantes de Smoking Stones son «perros viejos que conocen todos los trucos para hacer buen rock pero lo suficientemente jóvenes para conectar con las nuevas generaciones» y eso es lo que precisamente ocurrió ayer en el escenario de parque capitalino. Palentinos de todas las edades se reunieron para corear temas que han alcanzado la calificación de los mejores de la historia.

El cantante salió al escenario con un sorprender traje azul y rojo muy del estilo de Mick Jagger e inició su repertorio. También tuvo tiempo para saludar al público al que dijo:«Espero que os guste y baileis como locas», para proceder a cantar temas sosegados, tranquilos, en los que los guitarreos y el teclado tenían un papel destacado.

El cantante lograba por momentos confundirse con el líder de los Rolling y no dejó de moverse por el escenario, animando al público a aplaudir al ritmo de los temas, con esos movimientos espasmódicos tan típicos de Jagger.

Algunos de los temas eran los de los primeros años del grupo británico como  el blues You gotta move  que interpretó acompañado de otros dos miembros del grupo e incluso en su repertorio incorporaroncanciones de otras giras como Just my imagination, con la que el público fue entrando en calor, aunque también hubo sitio para otras más recientes como Don’t Stop.