El Comité de 'Nammo' cree que Defensa pone en peligro la fábrica

diariopalentino.es
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Dicen que por un céntimo menos por cartucho, van a adjudicar un contrato a una firma israelí

• Opinan que si sólo se tiene en cuenta la mejora económica se acabará con las 250 familias que trabajan allí y que pasarán a cobrar los subsidios por desempleo con un coste mayor.

 
El Comité de Empresa de la Fábrica de Armas de Palencia, perteneciente al grupo nórdico Nammo, denunció ayer que el Ministerio de Defensa va a adjudicar a una empresa israelí (IMI) el contrato de suministro de cartuchos del calibre 5,56 x 45 mm para el Ejército español por valor de 41 millones de euros (divididos en varios lotes) en vez de a la planta palentina, que le garantizaría trabajo para seis años (4 años más dos de prórroga). Nammo  Palencia había presentado igualmente su oferta para este contrato, uno de los más importantes de los que saca a concurso el Ministerio de Defensa en materia de munición.
De esta manera, aseguraron los representantes sindicales en un comunicado de prensa, «se pone en peligro la continuidad de la fábrica» y acusaron tanto a Defensa como al Partido Popular de «querer cerrar la planta palentina».
Según los sindicatos, existe malestar y desasosiego entre los trabajadores que ven como su trabajo «se va a una empresa (IMI) de un país que no permite que  entre en su mercado armamento exterior y que acaba de matar a un soldado español en misión de paz en el Líbano».
El Comité de Empresa indicó en su comunicado que «ahora se les llena al PP y al Gobierno la boca de la palabra recuperación, cambio de tendencia y mejora de datos macroeconómicos, pero 250 familias palentinas y otras de forma indirecta ven en serio peligro la supervivencia» de una fábrica que cumple 75 años en 2015.
Ante ello, los representantes sindicales anunciaron que «lucharán con uñas y dientes por los puestos de trabajo» y no descartaron iniciar movilizaciones.
Al parecer, la ventaja económica planteada por la empresa israelí es de un céntimo por cartucho «lo que es poco dinero de diferencia, unos miles de euros en el monto total del contrato (unos 600.000 euros en los 60 millones de cartuchos), pero no se dan cuenta de que la falta de horas de trabajo supone en el mejor de los casos merma en la nómina de los trabajadores y en la recaudación impositiva del Estado o, en el peor supuesto, despidos y que pasen a cobrar una prestación por desempleo con el consiguiente gasto para el erario público y considerablemente superior a las arcas», explicaron desde el Comité, que criticó que no se puede competir en igualdad de condiciones con empresas públicas (IMI es propiedad de Israel) y que sólo se valore la oferta económica.
En cuanto a otro contrato en liza, la oferta presentada por una de las competidoras supone 0,03 céntimos menos por cartucho.
Cabe recordar que la Fábrica de Armas de Palencia, bajo propiedad de Santa Bárbara Sistemas, se llevó el último contrato similar, por 31,2 millones de euros, en 2010. 
Si bien, en este caso no se aplicó ningún tipo de prórroga. Las otras dos partes del contrato se las llevaron la suiza RUAG (munición trazadora  por 3,4 millones) y la italiana Fiocchi (munición trazadora eslabonada) por un valor de 1,8 millones.