Inician el desmontaje de las vigas en 'Eras de Santa Marina'

Óscar Herrero
-

Dos grúas y varios operarios se encargan de retirar la estructura metálica para colocar otra de madera que aguante mejor la corrosión ocasionada por los gases del cloro

Labores de desmontaje en la piscina. - Foto: Eva Garrido

Las piscinas de Eras de Santa Marina han perdido su esqueleto. Costilla a costilla, los operarios contratados por la empresa El Corte Inglés han quitado ya algunas de las vigas que sujetaban la estructura del techo de las instalaciones. Techumbre que es lo primero que hace unas semanas comenzó a volar como inicio de unas obras calificadas en numerosas ocasiones de muy necesarias.

Dos grúas, una de  gran tonelaje y otra más pequeña, se encargan desde hace unos días de desmontar una a una las grandes vigas metálicas transversales, así como de los complementos también metálicos. Ambos son el principal problema de una estructura construida hace treinta años, puesto que los gases del cloro y la humedad interior han provocado la corrosión de los eleméntos férricos, comprometiendo incluso la seguridad de las instalaciones.

Por eso, la solución que se ha tomado es la de sustituir las actuales cerchas metálicas por nuevas vigas de madera laminada de 30 metros de longitud en el mismo punto en el que se encontraban la actuales. Es verdad que estas vigas de madera se apoyarán en estructuras metálicas, pero éstas quedarán fuera del influjo ambiental de la piscina.

En parte, porque el punto en el que se asientan dentro del edificio, en la parte alta del graderío, quedará dentro de los nuevos gimnasios que se van a construir aprovechando la reforma. Se pienden filas de gradas, pero esos metros serán aprovechados para otras actividades dentro del complejo deportivo más utilizado de la ciudad, según el Ayuntamiento.

En cuanto al acristalamiento, que desapareció hace varias semanas, también se cambiará colocando un cerramiento tipo climalit, lo que completado con la renovación del sistema de calefacción y ventilación evitará que se produzca la alta condensación de antes.

Cabe destacar que el nuevo sistema de calefacción y ventilación  no es una mejora del actual proyecto, sino que va vinculado al contrato de eficiencia energética que se adjudicó a Clece. Puesto que se iba a ejecutar esta mejora estructural en la piscina, se decidió retrasarla para no afectar al uso de la infraestructura en dos ocasiones.

Por adjudicación, el plazo para llevar a cabo la renovación de la cubierta era de tres meses. El Ayuntamiento lo licitó en cuatro, pero El Corte Inglés y otras veinte licitantes lo rebajaron en cuatro semanas. Puesto que el contrato fue firmado el 16 de junio, y las obras efectivas comenzaron hace poco más de un mes, deberán estar listas a finales de septiembre. «Parece que van en plazo y en poco tiempo deberán comenzar a montar la estructura», explicó el concejal de Deportes, Facundo Pelayo. «Vista como está, da una sensación de desangelada».