Carrión se reencuentra con la tradición de 'rodar la naranja'

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Las reliquias de San Blas fueron veneradas en el Monasterio de las Claras, en cuyas inmediaciones los jóvenes de la localidad cumplieron con la 'rodada' del cítrico

Carrión se reencuentra con la tradición de ‘rodar la naranja’ - Foto: Foto ELI

Carrión celebró ayer la Fiesta de San Blas con la tradicional rodada de naranjas.

Esta tradición no se sabe de donde viene pero todos los niños de Carrión y mayores recuerdan esta fiesta con agrado.

La fiesta, a pesar del frío reinante y de lo desapacible de la tarde, comenzó a las 17 horas  con la Santa Misa en el Monasterio de las Claras donde se encuentran las reliquias de San Blas, intercesor y protector de las enfermedades de garganta.

Se cumplió la tradición de acercarse, después de misa, a venerar las reliquias, el sacerdote da a besar la reliquia  con una mano, pasando la reliquia con un cilindro de cristal por la garganta.

En el monasterio de Santa Clara hay un pequeño altar donde se venera a este Santo.

Después de este rito los niños que veneraron las reliquias cumplieron con otra de las tradiciones, rodar las naranjas por la explanada de las Claras y las eras de Santa María.

Se supone que su origen  sería la visita del Cid a sus hijas, a las que traía naranjas de Valencia, aunque cuando llegó a Carrión, no las encontró, lanzando todo tipo de insultos a sus yernos, y les lanzó las naranjas. Éstas, al ser una fruta exótica para los niños castellanos originaron entre ellos una pelea.

Enfado. Con el enfado y los gritos, perdió el Cid la voz y al salir de Carrión entró en Santa Clara y tras besar la reliquia de San Blas, recuperó su voz. Esto es lo que dice la tradición popular, aunque la historia lo desmiente, ya que las hijas del Cid no se casaron con los Infantes de Carrión y el monasterio de Santa Clara no se funda hasta el siglo XIII.

Una tradición que los padres mantienen llevando todos los años a los mas pequeños y que los mayores recuerdan con agrado.

En este  día es típico degustar los lazos de San Blas que las clarisas realizan como dulce típico, así como otros productos de repostería que realizan durante todo el año.

También se les ofrece a todos los niños que se acercan  una naranja para rodarla.

Con esta fiesta también finaliza la edición de exposición de Belenes del Mundo que fue inaugurada por los Duques de Alba el 3 de diciembre y que ha permanecido abierta durante tres meses.