Con voz, voto y bastón de mando

E. Marín
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Las mujeres se hicieron por un día con el poder del municipio • El regidor destacó el papel fundamental que tienen en la vida de los pueblos y en el asentamiento de población

La celebración, organizada por la ‘Asociación de Amas de Casa Santa María’, supuso una jornada de disfrute para jóvenes y mayores del pueblo. - Foto: ÓSCAR NAVARRO

«Las mujeres de Becerril somos muy trabajadoras, alegres y siempre que se nos necesita ahí estamos». Así hablaba ayer María Dolores Arenillas, tras recoger el bastón de mando municipal de manos del regidor, Mario Granda. «Es un día por y para nosotras».

En Becerril de Campos, el día de las Águedas es una de esas jornadas señaladas en el calendario de cientos de mujeres que disfrutan al poder tomar la iniciativa ylo pasan muy bien con la celebración de una tradición recuperada.

La Asociación de Amas de Casa Santa María fue la responsable hace unos años de retomar esta fiesta e instaurar una celebración que tiene sus peculiaridades y a la que cada año se suman más participantes.

La jornada comenzó con la concentración de mujeres en el Ayuntamiento, desde donde se dirigieron a la iglesia de Santa Eugenia, para participar en la procesión  que se realizó en su interior antes de la misa solemne.

Allí, el alcalde traspasó por un día los poderes a Lolita, como la conocen en el pueblo, y dejó el mando a las mujeres, «las verdaderas artífices de la vida en los pueblos y las que pueden ayudar al asentamiento de población en el mundo rural». «Si las mujeres optan por abandonar los pueblos se llevan a toda su familia y es importante que se queden para seguir potenciando la vida en los pequeños municipios», señaló Granda.

La entrega del bastón municipal tuvo además una nota curiosa, ya que ambos alcaldes fueron compañeros de Corporación en la última legislatura presidida por Mariano Haro, «por lo que tengo claro que la alcaldesa lo hará muy bien, ya que sabe cómo funciona esto de dirigir un pueblo», apuntó con cariño el regidor durante la ceremonia.

Granda insistió en que «el vínculo y el pilar fundamental de los pueblos son las mujeres».

Lolita, que aceptó con «orgullo, honor y alegría» esta responsabilidad, insistió en la importancia que tiene el que las mujeres sean valoradas y se destaque todo lo que hacen, «tanto en el seno de las familias, como en favor de los pueblos».

de época. Tras el acto simbólico, las mujeres de Becerril compartieron mesa y mantel en un ambiente en el que no faltó la música castellana, la diversión y en la que los trajes de época también tuvieron su protagonismo. Varias de las mujeres se vistieron con bonitas indumentarias en las que destacaban las faldas largas, a las que sumó alguna que otra capa castellana.

El colectivo responsable del evento, que está formado por 140 mujeres, lleva 15 años celebrando esta festividad.