No todo lo que se recauda por las multas de tráfico es harina limpia para las arcas del Ayuntamiento. Dependiendo de  qué tipo de sanción sea, parte de lo ingresado por el conductor imprudente acabará en la cuenta de resultados de una empresa, en este caso, de la que el Ayuntamiento contrate para la gestión de las multas. 
Así, las que tienen un mayor coste para el Consistorio son las que vienen de los dos foto rojos, puesto que son dos dispositivos que son alquilados. Así, cada una de las multas que pongan estos aparatos, el Ayuntamiento pagará 12,92 euros a la empresa gestiora y propietaria, hasta un máximo de 137 multas al mes. A partir de ese momento, la cifra cae hasta los 0,60 euros, hasta las 164. Ese es el precio que el Ayuntamiento se compromete a pagar a la adjudicataria del contrato por cada multa de la ORA que gestione.

Lea la noticia ampliada en la edición de papel o en kiosko.diariopalentino.es