El secretario general del PSOE y candidato a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, auguró ayer que la próxima será una legislatura «de justicia» y «solidaria» con los ciudadanos y, en este sentido, se comprometió a crear «una nueva tarifa social» para luchar contra la pobreza energética, que estará dirigida a los «consumidores vulnerables». Con ella, pretende dotar a este colectivo de la población de un marco «que les garantice la subsistencia los meses más fríos, entre el 1 de noviembre y el 31 de marzo». Asimismo, adelantó que tendría un coste de 120 millones de euros en el Presupuesto del Estado.
Para ello, la cobertura energética básica se considerará un derecho social, según explicó durante una conferencia en Córdoba. Se regulará «quién está en situación de pobreza energética» y se impedirá «la interrupción de suministro energético por impago». «Los consumidores vulnerables accederán a una tarifa social, en función de sus ingresos, y no habrá corte de suministro en invierno para quienes se encuentren en esta situación», subrayó.
El líder del PSOE recordó que en España hay «siete millones de españoles y españolas que tienen enormes dificultades para hacer frente a estas facturas a final de mes», hasta el punto de que «hay familias que deben elegir entre comer o pasar frío», lo cual ocurre en un país en el que, tras los cuatro años de Gobierno de Mariano Rajoy, «hay 200.000 beneficiarios menos del bono social», resultando «chocante» que, en cambio, «se pueden beneficiar del mismo segundas viviendas que se encuentran actualmente vacías».
Ayuda a menores. Pedro Sánchez también se comprometió a «extirpar la pobreza infantil», estableciendo lo que denominó Ingreso mínimo vital, que requerirá una dotación de 6.000 millones de euros al año. En este sentido, el político socialista lamentó que España es, tras Letonia, «el segundo país con más desigualdad de la Unión Europea», siendo evidencia de ello que en el territorio nacional «muchos niños y niñas sufren problemas de malnutrición y pobreza, y que personas de todos los perfiles profesionales comparten mesa en comedores sociales».
Ello es el claro reflejo, según subrayó el dirigente madrileño, de que «en España hay pobreza», incluso entre «quienes tienen trabajo y no llegan a fin de mes como consecuencia de la reforma laboral del PP» y también afecta, en mayor medida, a «aquellos que sufren el paro de larga duración y a los cuales han cortado la cobertura del desempleo».
Ante ello, el compromiso del líder del PSOE es convocar a la mayoría de españoles, de instituciones, fuerzas políticas y organizaciones, «para extirpar entre todos la pobreza, sobre todo la infantil», aprobando para ello un Ingreso mínimo vital dirigido, principalmente, a los 700.000 hogares sin ningún tipo de salario.
Por otra parte, hoy explicará sus propuestas en materia de política exterior en un acto en Madrid al que acudirán exministros, diplomáticos y expertos.