El Centro de Información Juvenil y Escuela Municipal de Tiempo Libre de Palencia, situado en la avenida de Asturias y anteriormente conocido como Espacio Joven, reabrió ayer sus puertas con un curso de Monitor de Tiempo Libre, en el que se han inscrito un total de 30 jóvenes.
Una vez rehabilitados los destrozos resultantes del robo sufrido el pasado 13 de mayo, el Ayuntamiento ha abierto al público esta instalación municipal que, no obstante, ya ha funcionado durante las recién terminadas Fiestas de San Antolín.
«Nos hemos visto obligados a sufragar los gastos realizando un tremendo esfuerzo y destinando otras partidas del presupuesto para cumplir con el compromiso que expresó el alcalde el pasado 27 de julio», explicó ayer la edil de Juventud, Vanesa Guzón.
El centro estará abierto de lunes a jueves en horario de 16,30 a 20,30 horas para que todos los jóvenes que lo deseen puedan disfrutar de un lugar de reunión, pasar el rato con los amigos y disfrutar de los recursos del edificio, sumándole el hecho de que los viernes se celebrarán también allí las actividades del programa + Joven, para jóvenes de 13 a 17 años.
«Este equipo de Gobierno siempre ha querido mantener esta dotación abierta para el uso y disfrute de los jóvenes palentinos», explicó el alcalde de Palencia, Alfonso Polanco, quien añadió que si no lo ha estado antes ha sido «por los problemas ocasionados por el robo y los destrozos ocasionados el pasado mes de mayo» y reiteró que, frente a las dudas interesadas creadas por otros grupos políticos, «nosotros hemos cumplido y a partir de hoy funcionará con total normalidad».
estreno. La Asociación de Voluntariado Puente de Vida organizó la semana pasada en el Espacio Joven las Veladas Lúdicas, por un ocio diferente. Con ayuda de otras asociaciones juveniles como ACUP, Japan Town, Akihabara, Ghalmaraz y Conexión, se dio a conocer algunos juegos de mesa, cartas y rol muy poco conocidos en el ámbito lúdico de nuestros jóvenes, más acostumbrados a tener una pantalla y un mando entre las manos, para pasar sus ratos libres.
Hubo una «muy buena acogida» y fueron muchos los palentinos que quisieron formar parte de esta exhibición. También se proyectaron películas anime y se practicó el baile para-para muy de moda en los círculos nipones.