El Palencia Cristo Atlético volvió a la senda de la victoria. Lo hizo por la mínima ante el Burgos Promesas 2000, que plantó cara a los de Jonathan Prado pero no pudieron hacer nada para impedir un nuevo triunfo morado.Los palentinos alcanzaron su jornada número 14 invictos, a pesar de que los locales pusieron las cosas muy complicadas en todo momento a partir de su lucha y su coraje defensivo. El Burgos Promesas arrancó con fuerza y llegó a arrinconar a los visitantes en su zona defensiva, pero sin crear oportunidades claras. Pero a los trece minutos de la segunda mitad, y después de que Prado moviera su banquillo por vez primera, llegó el primer y único tanto del encuentro. Adri ganó la línea de fondo hasta encontrar a Jaime Pelayo, que envió el esférico al fondo de las mallas.