Triunfo con sufrimiento

SPC
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Dembélé y Ter Stegen rescatan al Barcelona ante una Real Sociedad que se adelantó en el marcador

El Barcelona, con goles de Luis Suárez y Ousmane Dembélé en la segunda mitad, remontó ayer ante la Real Sociedad para afianzarse como líder invicto de la Liga, en un encuentro en el que el guardameta alemán Marc-André Ter Stegen mantuvo vivos a los azulgranas imponiéndose en dos claros mano a mano cuando los locales dominaban en el marcador.

En un estadio de Anoeta remodelado, las pesadillas comenzaron siendo las de siempre para los culés. La ausencia del once de Busquets evidenció desde el inicio los problemas en la salida de balón del cuadro visitante, pasivo y falto de fluidez. En cambio, su rival, defendiendo en línea de cinco en las contadas ocasiones en las que los de Ernesto Valverde consiguieron aproximarse al área, armó su estrategia amparados en un altísimo nivel de presión que mantuvo durante los primeros 45 minutos. 

Solo se habían jugado 12 minutos cuando los de Asier Garitano consiguieron perforar la meta catalana en una acción a balón parado. Héctor Moreno y Sergi Roberto saltaron a por el esférico, que, tras tocar en el jugador culé, cayó muerto para que Aritz Elustondo rematase con la zurda al fondo de las mallas. 

 Piqué tuvo que desbaratar, siete minutos más tarde, el segundo de la Real en un pase raso de Oyarzábal que despejó el central culé antes de que llegase a un bien posicionado Rubén Pardo. Del defensor barcelonés fue también la mejor oportunidad de los azulgranas, en un cabezazo que se marchó por encima de la portería de Rulli. 

Cambios en el once. Así, el Barça se marchaba a vestuarios con los deberes por hacer. Ni el equipo funcionaba ni Messi, extremadamente marcado, aparecía. No tardó en rectificar Valverde y dio entrada a Coutinho por Semedo y Sergi Roberto retornó al lateral. Con ello y con la incorporación de Busquets, el vigente campeón comenzó a carburar. Antes, Ter Stegen se lució ante Theo Hernández y Juanmi, salvando a los suyos del 2-0.

Con el cuadro ‘txuri-urdin’ lamentando las ocasiones perdidas, apareció Suárez. Tras un saque de falta, Piqué remató de cabeza al segundo palo y Rulli frenó la ocasión, pero en la continuación de la jugada, la pelota llegó a las botas del uruguayo, que equilibró la contienda. Solo tres minutos después, un error en la salida del portero local lo aprovechó Dembélé para rematar a puerta vacía. 

De esta manera, el cuadro azulgrana se mantiene en el primer puesto con su cuarta victoria en otros tantos partidos, antes de afrontar su estreno, el próximo martes, en la Liga de Campeones recibiendo al PSV Eindhoven.