Ecologistas en Acción (EeA), Asociación para la Conservación y Estudio del Lobo Ibérico (Ascel), Fondo para la Protección de Animales Salvajes (Fapas), Asociación de Naturalistas Palentinos (ANPA) y la Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cantábrica unieron ayer fuerzas en la capital para mostrar su desconfianza con la versión oficial de la muerte del oso pardo hallado la pasada semana en los montes de Muñeca de la Peña, en el término municipal de Guardo.
La necropsia provisional del plantígrado, que certificó que murió a causa del ataque de otro congénere, es uno de los puntos en los que se mostraron más críticos, desconfiando de la forma de proceder de la Universidad de León «porque no es normal que primero se informase de que la investigación se iba a hacer el lunes y finalmente se hizo de forma apresurada el sábado antes de las 17 horas», explicó Alberto Fuentes, responsable de EeA-Palencia.
Además, indicó que en las imágenes del estado del plantígrado que han podido examinar durante los últimos días, «no se observan heridas en la parte de la cara y en los cuartos delanteros, que es donde se suelen atacar los osos, y no en la parte trasera y en la zona lumbar como es el caso del ejemplar encontrado en la Montaña Palentina, que podrían haber sido producidas por un perro de presa».
Del mismo modo, Fuentes insistió que el hecho de haber hallado al animal próximo al cauce de un río y el estado de cicatrización que presentaban alguna de las heridas, «hacen pensar que ya llevaba varios días malherido y buscaba aliviar el dolor cerca del agua».
Por este motivo, los ecologistas anunciaron que solicitarán un informe a la Junta de Castilla y León en el que se especifiquen las cacerías que tuvieron lugar en la zona en los últimos días. Y es que, alertaron de que la muerte de un oso en circunstancias como las acontecidas en Muñeca, «pueden ser constitutivas de un delito, de hecho se están instruyendo diligencias por ello en el Juzgado de Cervera de Pisuerga».
OCHO MUERTES. Esta nueva muerte de oso pardo en la comarca norteña viene a constatar, según los ecologías, que el Parque Natural Fuentes Carrionas y Fuente Cobre, «es un sumidero para estos animales, con un mínimo de ocho ejemplares muertos por causas no naturales desde 2001».
Estos casos se han registrado en los términos municipales de Triollo, Polentinos y Cervera de Pisuerga por diferentes causas tales como envenenamientos, disparos e incluso uno de los plantígrados fue hallado sin cabeza en abril de 2009.