alberto moreno / palencia
A hora que el nuevo Deportivo Palencia lucha por el ascenso a Segunda División B, hoy precisamente se cumplen 25 años de aquel histórico ascenso del CF Palencia en Compostilla, en Ponferrada, ante el Endesa.
Aquel equipo vivió una situación muy parecida al club deportivista. El Palencia CF desapareció en 1986, solo dos años después de haber jugado su cuarta temporada en Segunda A. En una artimaña por aquel entonces legal, su filial, el Cristo Olímpico, que jugaba en Tercera, se desvinculó antes de acabar la temporada con el objetivo de que la más que posible desaparición del club no le arrastrase y seguir teniendo fútbol en la capital con su equipo de chavales.
Tardó ese equipo, que mantuvo los colores, las camisetas, el escudo y cambió su nombre por el de CF Palencia, en ganarse el corazón de los seguidores morados, desolados por la desaparición del primer equipo. Poco a poco fue recuperándolos y lo acabó de conseguir en la histórica temporada 1989-90. Con un equipo plagado de jugadores palentinos, salvo los Tapias, Molinero, Carlos Abel y Luis Gangoso, y un técnico de la casa, Mariano García, logró el ascenso tras superar al posiblemente mejor filial que jamás haya tenido el Valladolid, de los Amavisca, Santi Cuesta, Bernal, Peña, Alfonso, Piti y Juan Carlos. Muchos de ellos llegaron a jugar en Primera División y en el caso de Amavisca, en el Real Madrid y la selección española. Aquel CFPalencia compaginó la juventud de los Pedro Alberto, Cantero, Fernando, Fran con la veteranía y clase de los Cano, Uco y Lolo, junto a futbolistas ya con tablas como Mauro, Martín, Geli, Paco y la calidad de fichajes foráneos como Molinero. Una composición de plantilla muy parecida a la del actual Deportivo.
Por aquel entonces, subía a Segunda B el campeón. No había play-off. El CFPalencia culminó una espectacular remontada en la segunda vuelta y empezó a creer en el ascenso tras vencer al Valladolid Promesas en el José Zorrilla, justo a la conclusión de unValladolid-Real Madrid en el que ganó la liga el cuadro merengue.
El 27 de mayo de 1990, ambos equipos llegaban a la última jornada empatados a puntos, pero con los morados por delante al tener el average favorable. El Promesas jugaba en Bembibre y ganó 1-3. El CFPalencia lo hacía en Ponferrada, ante el Endesa, en Compostilla. Ganó 0-2 con 2.000 palentinos en sus gradas y subió.
Con 25 años y algunos kilos más, los dos equipos que protagonizaron aquel duelo por el ascenso se vuelven a medir y también juntar en un particular tercer tiempo. Jugarán el viernes un partido amistoso de fútbol-7 a las 19,30 horas en Eras de Santa Marina. Tras el mismo, se reunirán los jugadores del CFPalencia y Valladolid Promesas en un vino español, donde se ofrecerán imágenes de aquel duelo en el José Zorrilla. Seguidamente, cena en el Restaurante San Pablo, propiedad de dos jugadores de aquel equipo morado, Uco y Tovar. El lunes, en La Jornada de La 8 Palencia, un resumen de una hora de aquel partido histórico en Ponferrada.