Mejorar la efectividad y eficacia de los medicamentos aportando información sobre incidentes de seguridad relacionados con el uso, el seguimiento de medicamentos que han salido al mercado recientemente o detectar nuevos usos no indicados de medicamentos. Estos son algunos de los objetivos por los que se pusieron en marcha las farmacias centinela en septiembre de 2015 y, a tenor de los resultados, se están cumpliendo su finalidad.
Así, la red de farmacias centinela de Castilla y León ha registrado desde su puesta en marcha un total de 185 reacciones adversas y 688 errores de medicación. Tal ha sido el éxito de su funcionamiento, que los resultados han propiciado que su presencia aumente exponencialmente en Castilla y León. De esta manera se ha pasado de contar con un centenar a tener 170 establecimientos sanitarios distribuidos por la Comunidad que ejercen la labor de farmacovigilancia.
En el caso de la provincia, inicialmente se encomendó esta labor a cuatro oficinas de farmacia, las que correspondían tras la oportuna distribución geográfica por estratos. Ahora se acaban de sumar otras tres, por lo que en la actualidad hay siete establecimientos los que tienen encomendada esta labor: dos en la capital y cinco en el ámbito rural.
«Los profesionales estamos obligados a velar por la seguridad de los pacientes y por mejorar todo lo que esté relacionado con los medicamentos. Esta red permite un mayor incentivo y el estar más atentos para ver cuándo aparecen determinados problemas o errores», explica José Luis Nágera, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Palencia.
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