La concentración contra la violencia machista reúne a 200 guardenses

Rubén Abad
-

Autopsia. Los forenses habrían identificado hasta tres puñaladas en el pecho de Carmen María Ocampo

Condena de los hechos. La lectura del manifiesto del Ayuntamiento concluyó con un aplauso de los asistentes

 
Los gestos de dolor, consternación y tristeza eran aún visibles ayer en Guardo, veinticuatro horas después de descubrirse en el interior del Bar Peña Redonda de la localidad minera los cuerpos sin vida de Carmen María Ocampos (que apareció acuchillada sobre un charco de sangre) y Ángel P. Trapote (que fue hallado ahorcado). Según EFE, la Subdelegación confirmó que se trata de un caso de Violencia de Género.
Este hecho llevó a que unos doscientos vecinos del municipio montañés y otras localidades de la comarca se concentrasen en la calle La Iglesia, frente a las puertas de la Casa Consistorial, en un acto convocado por el Ayuntamiento y al que se unieron diferentes colectivos con presencia en la villa y vecinos anónimos. Allí se leyó un comunicado  consensuado entre los cuatro Grupos Políticos con representación en la Corporación Municipal (Partido Popular, Ciudadanos, Partido Socialista e Izquierda Unida) con el objetivo de «hacer pública nuestra más enérgica repulsa sobre este hecho y, en general, sobre cualquier tipo de violencia machista, una cuestión que constituye una lacra continua y constante que, lejos de terminar, no cesa».
Fue la concejala de Mujer, María José García Estrada, quien se encargó de hacer público este manifiesto que concluyó con un minuto de silencio y un sonoro aplauso en señal de respeto a Ocampos y al resto de mujeres que han perdido la vida a manos de sus parejas sentimentales.
Así, aseguró también que la violencia contra las féminas «es el símbolo más brutal de desigualdad entre mujeres y hombres en nuestra sociedad y supone un serio atentado contra la dignidad y la integridad física y moral de las mujeres y, en consecuencia, conlleva una grave e intolerable violación de los Derechos Humanos. Recordamos, por tanto, la responsabilidad y la necesidad de luchar de forma conjunta contra esta lacra desde todas las instancias de la sociedad, instituciones y ciudadanía, alzando la voz y denunciando sin miedo cualquier atisbo de violencia y coacción machista».
En nombre del resto de corporativos del Ayuntamiento y por ende de todos los residentes en la localidad montañesa, García Estrada condenó este hecho y expresó «su total rechazo e indignación por el asesinato». 
De igual forma, animó a los guardenses a ser «proactivos y a construir una sociedad no permisiva ante cualquier comportamiento vejatorio hacia las mujeres» y recordó que  la violencia de género «es el símbolo más brutal de la desigualdad, por lo que solo con la implicación de toda la ciudadanía y el necesario cambio de valores para construir una sociedad igualitaria, se conseguirá acabar con el problema de la violencia doméstica».
La concejala concluyó que la muerte de cualquier mujer a manos de su pareja «es la expresión máxima de la violencia contra las mujeres, pero en el día a día se producen muchas actitudes y expresiones de estas agresiones, todas ellas condenables y reprobables».
Hasta el municipio se desplazaron la directora de la Mujer de la Junta de Castilla y León, Esperanza Vázquez; el delegado territorial, Luis Domingo González; la presidenta de la Diputación Provincial; Ángeles Armisén; amén de los alcaldes de Velilla, Santibáñez y Saldaña, entre otros cargos públicos.
 
INVESTIGACIÓN. Mientras tenía lugar la movilización, varios agentes de la Guardia Civil continuaban con su investigación en el lugar de los hechos. Además, se practicó la autopsia a los fallecidos en el Tanatorio Virgen del Carmen. Aunque es pronto todavía para desvelar el resultado final, sí se avanzó que la mujer habría recibido hasta tres puñaladas en el pecho, una de ellas mortal. Las otras dos penetraron en la cavidad torácica, sin  afectar a ningún órgano vital.
El funeral de Ángel P. Trapote se celebrará hoy a las 12 horas en la iglesia de Santa Bárbara. Posteriormente será incinerado. Por otro lado la autoridad judicial se ha puesto en contacto con la Embajada de Nicaragua en España para iniciar los trámites de repatriación si la familia de Carmen María Ocampo opta por esta posibilidad.
Teléfono para denunciar casos de violencia de género: 016.