La consejera de Cultura y Turismo, Alicia García, visitó ayer Fuentes de Nava, cuya iglesia de Santa María es objeto de restauración. Las actuaciones, que comenzaron el pasado noviembre y se prolongarán hasta noviembre de este año, afectan a la estructura vertical, para resolver los problemas de estabilidad del atrio, y sobre los entramados de cubierta, para eliminar  empujes sobre los muros, racionalizar el apoyo de la sobrecubierta sobre el entramado histórico y mejorar la estabilidad del conjunto. Además,  como complemento, se mejorará  la accesibilidad y la iluminación monumental.

Alicia García explicó que la Junta de Castilla y León invierte en esta restauración más de 600.000 euros y recordó que la intervención se suma a las desarrolladas en esta legislatura en 43 bienes de 31 localidades de la provincia con inversiones que ascienden a unos tres millones de euros. Señaló además que a través del Románico Norte, puesto en marcha en 2005, «se ha actuado en 54 iglesias en las provincias de Palencia y Burgos con una inversión que supera los ocho millones de euros».

La consejera de Cultura y Turismo defendió el patrimonio cultural como «verdadero recurso económico» y destacó la riqueza tanto natural como patrimonial de Fuentes de Nava.  

El alcalde de la localidad, Jesús Gutiérrez, se refirió que después de años, a lo largo de los cuales «la prisa se fue haciendo paciencia», llegó la hora. «Se va a recuperar, pero va a hacer falta más». Y es que  artesonado, fachada y espacio interior entran en otra fase.  

La iglesia de Santa María de Fuentes de Nava está catalogada como Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento desde el 23 de junio de 1978 junto con su torre (exenta). Se edificó en el siglo XVI, con ampliaciones y reformas realizadas en los siglos XVII y XVIII. Aparte de su bella portada gótica de estilo Reyes Católicos, conserva en su interior un majestuoso artesonado mudéjar policromado, del más puro estilo castellano, catalogado como uno de los más importantes de toda la región por su calidad y conservación. En su interior destaca el retablo mayor del siglo XVIII, una bellísima Asunción de Alejo de Bahía y un Cristo gótico, ambos del siglo XV.

Se está trabajando en la restauración de los aleros del crucero. Al descubrir la tabla y los canes en su parte superior se puede observar que buena parte son piezas de madera recuperadas, posiblemente del artesonado policromado que hubiera en la nave lateral norte dada la similitud del tallado de las viguetas con las existentes en la nave lateral sur, recientemente descubiertas. Así,  en la nave de la iglesia se ven  aquellas tablas que presentan policromías. Asimismo prosiguen en el interior de la iglesia los trabajos de apeo de viguetas en la nave lateral sur y de eliminación de revestimientos en las columnas de piedra.

A pie de calle se pueden ver  los estabilizadores de fachada, que permanecerán montados mientras se realicen las labores de refuerzos estructurales previstas. En la cubierta se han desmontado ambos lucernarios y se ha desmontado y reconstruido la espadaña con ladrillo tejar, volviendo a colocar el campanil en su posición original.

Señalar asimismo que se va reponer la escalera de acceso al coro, porque se demolió en su día y allí estaba la caldera. Las circulaciones eran absurdas, porque había que entrar por la Sacristía y usar una escalera interior.