Más de 500 personas se concentraron hoy en la plaza de Castilla y León, en Villabuena del Puente (Zamora) para protestar contra la violencia hacia las mujeres y en memoria de Laura Luelmo, la joven zamorana cuyo cuerpo sin vida apareció ayer en las inmediaciones de El Campillo (Huelva).

Las personas que participaron en la concentración describieron un amplio círculo, al igual que ha ocurrido en las concentraciones convocadas en la capital zamorana y en Toro. Frente al Ayuntamiento, personas allegadas a Laura Luelmo y el alcalde de Villabuena del Puente, Constantino de la Iglesia sostuvieron una pancarta de color morado en la que se leía, en grandes letras de color blanco, “Ni una menos”.

Algunas de las personas concentradas exhibieron carteles en los que se leía “No nací mujer para morir por serlo”, “Nuestro silencio de hoy hace más ruido que nunca” y “Te enseñan a no ir sola por sitios oscuros en vez de enseñar a los monstruos a no serlo. Ese es el problema”.

Luis, amigo personal de Laura Luelmo, se dirigió a los presentes para recordar que “hay palabras que no dicen anda y silencios que lo dicen todo” y añadió: “Familiares de Laura, Villabuena está con vosotros. Vamos a comenzar cinco minutos de silencio, por favor”.
Después del silencio, la multitud prorrumpió en un largo aplauso.

"Rabia".

El alcalde de Villabuena del Puente, Constantino de la Iglesia, en medio de la emoción, describió su “rabia” hacia “este criminal que ha matado a Laura” y apostilló, en declaraciones a la agencia Ical: “Esto es muy fuerte y pensábamos que nunca llegaría aquí porque lo veías fuera y pensabas que qué pena. Esto va a más. Este delincuente ha matado y ahí está. Acabó con la vida de Laura y sus padres… Tengo hijos y con miedo de que no puedan salir ni a la puerta de la calle”.

Una vecina se mostró “indignadísima” porque “ellos están sueltos y nosotras tenemos que estar encerradas” e invitó al Gobierno de España a modificar las leyes. “Tenemos miedo a todo, a salir de casa a dar un paseo. Antes, en los pueblos, teníamos las puertas con las llaves puestas”, aseguró. “No está bien que ahora tengamos que ir acompañadas a todos los sitios, cuando antes salíamos solas sin ningún problema”, comentó una joven de 20 años. “Es una vergüenza. Tiene todos los favoritismos. Con dos hijas, y que tenga que estar con el miedo de si vendrán o no, no es normal”, añadió Elisa, su madre.

El alcalde de Morales de Toro, Luis Segovia, coincidió con los vecinos de Villabuena al expresar su “rabia” y declaró a Ical que “mientras no hagan las leyes en condiciones para que, al menos, los reincidentes no vuelvan a salir, no hay nada que hacer” y recordó que “cuando se trata de un reincidente, es doblemente doloroso” que se produzcan sucesos de este tipo.

Por su parte, el diputado provincial de Turismo, José Luis Prieto, recordó a Ical que “la violencia no entiende de números, de lugares ni de despoblación”, sino que “aparece porque hay seres violentos”.

En este contexto, advirtió de que “no se deberían confundir los términos”, porque “esto es un asesinato y tenemos que intentar evitar estas situaciones” y concluyó: “Que alguien cometa un delito, salga y vuelva a cometer otro es un aberración que no podemos permitir como sociedad. Entre todos tendremos que ayudar para vivir en una sociedad protegida que no tenga miedo a salir a hacer deporte, a trabajar o a lo que sea”.

El acto contó  también con la presencia de los regidores de Toro, Abezames, Villavendimio, Venialbo y Vezdemarbán, entre otros representantes públicos.