Quienes esperasen que la procesión de la comunidad educativa del Divino Maestro iba a ser una mera copia de una procesión se equivocaban.

Lo que se pudo ver ayer en las principales calles de la capital palentina era una auténtica procesión digna de cualquiera de las cofradías penitenciales que participan en esta Semana Santa.

A las 12 de la mañana los casi 200 alumnos y profesores que participaron en el desfile se encontraban en la calle Valentín Calderón, junto a la capilla del Santo Sepulcro, preparados para comenzar la primera procesión que ha abierto la Semana de Pasión palentina. Sus caras reflejaban ese nerviosismo fruto de sentirse protagonistas de una procesión pero también de las ganas de disfrutar de un evento en cuya preparación se han volcado durante meses.

La recreación fue tal que hasta dos alumnos del centro hicieron las veces de agentes de la Policía Local para abrir el paso a la procesión durante el recorrido.

Tras ellos, una profesora encargada de dirigir la marcha de los alumnos cofrades. Los primeros, los más pequeños, acompañados en todo momento por profesoras y alumnos más mayores que les ayudaron a mantener la formación.

Además de los casi 200 participantes en esta procesión, como no podía ser de otra manera, desfilaron pasos, en concreto una cruz y tres imágenes portadas por los alumnos del Divino Maestro. Los docentes y algún miembro de la Hermandad de Cofradías marcaban el paso a llevar durante todo el recorrido.

Hay que recordar que dos de los cuatro pasos, para ser más exactos  una Virgen Dolorosa y un Cristo con una cruz a hombros, son obra de un alumno del colegio, Alberto Paredes. El tercer paso es un Crucificado que ha sido cedido para la ocasión por una familia del centro y, por último, una Cruz con una sábana en representación de Jesús Resucitado.

La implicación de la comunidad educativa de este centro ha ido más allá, puesto que las túnicas que lucían los cofrades son fruto de la colaboración de numerosas familias que llevan meses elaborándolas. Son azules con capirote, realizado en cartulina, y cíngulo naranjas, a los que se incorporaron unas medallas con el escudo del centro educativo.

Algunas alumnas del Divino Maestro optaron por ir de manolas, una figura que tampoco podía faltar en una procesión que se precie en la Semana Santa palentina. El alcalde de Palencia, Alfonso Polanco, aceptó gustoso la invitación formulada por el centro educativo y acudió para cerrar el desfile, acompañado del presidente de la Hermandad de Cofradías, Ángel Martínez, así como representaciones y autoridades religiosas. También se pudo ver al director provincial de Educación, Sabino Herrero.

varios meses de trabajo. El trabajo desarrollado durante varios meses por profesores, alumnos y padres del Divino Maestro ha dado sus frutos. Una idea que nació hace tres años en el centro y que se materializó en 2014 cuando los profesores de Educación Infantil se animaron a ponerla en marcha.

El pasado año se llevó a cabo en el patio del colegio y en los alrededores de San José y visto el éxito que tuvo desde la Hermandad de Cofradías se les invitó a formar parte de la Semana Santa palentina y abrir el programa de procesiones.

Con la responsabilidad que esto conlleva se pusieron manos a la obra y el resultado ha sido excelente con el consiguiente orgullo de todos los implicados, entre ellos los padres de los alumnos participantes en el desfile.

Decenas de ellos acudieron ayer y se apostaron a lo largo y ancho del recorrido de la procesión, siguiendo con gran interés cada paso que daban sus hijos.

Es de alabar también el esfuerzo que supuso para los alumnos el estar hora y media procesionando  por las principales calles de la capital palentina.