Camino de Belén

Esther Marín
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Las cofradías de la capital, el Obispado y las Instituciones muestran su particular visión del nacimiento de Jesús

El belén de la ‘Vera Cruz’ es de los más visitados. - Foto: EVA GARRIDO

Los albores de la Navidad vienen marcados de plano por la instalación de los tradicionales belenes. Los hogares palentinos suelen colocar sus pequeños portales llegadas estas fechas y, aprovechando el puente festivo, muchos son los que llenan estancias, fachadas y locales con las figuras y decoraciones propias de la Navidad.

Instituciones, colectivos y organizaciones varias también coinciden estos días en colocar en sus dependencias belenes de distintos y variados materiales, procedencias y estilos.

Entre los más llamativos y visitados se encuentran los pertenecientes al ya tradicional recorrido belenístico de las Cofradías Penitenciales, una ruta que forma parte de la Navidad palentina y que atrae a cientos de visitantes cada año. Belén a Belén muestra los trabajos de siete cofradías que instalan sus Nacimientos en las dependencias de sus sedes, además del belén del Obispado de Palencia, que se ubica en el hall del Palacio Episcopal.

Las Cofradías de la Vera Cruz (calle Obispo Manuel González, 9), Jesús Nazareno (plaza de San Pablo, 7), Santo Sepulcro (Lope de Vega, 10), Cristo de la Misericordia (calle Mayor Antigua, 50), Jesús Crucificado (Atrio de San Francisco), Virgen de la Piedad (Mancornador, 4) y Jesús de la Sentencia (Paseo del Otero, 13)de la capital han montados los belenes en sus locales -algunas todavía lo están haciendo como La Piedad-, de manera que todo el que quiera acercarse pueda visitar su particular visión de la llegada de Jesús de Nazaret.

La Vera Cruz exhibe uno de los belenes más llamativos y visitados de la ciudad. Se trata de un espacio en el que, además de las figuras tradicionales, se colocan edificios, plantas naturales -que se cultivan expresamente para este fin-, arena, piedras y otros elementos. Además se puede disfrutar de una seria de efectos especiales como tormentas, rayos, vientos y diferentes juegos de luces que simulan el día y la noche.

La Cofradía de Jesús Nazareno ha optado por una exposición «austera, sencilla y muy limpia», tal y como explica el hermano mayor. En este belén se pueden ver diferentes oficios de la época en varios espacios, destacando que las piezas han sido pintadas a mano por cofrades.

El trabajo del Santo Sepulcro incluye pequeños detalles y piezas que muestran la historia de quien los adquirió o los construyó en su día.

Un llamativo castillo, personajes curiosos o un gran mercado son algunos de los elementos que llaman la atención del visitante.

Por su parte, en la entrada del Ayuntamiento de la capital se expondrá una selección de casi treinta misterios o belenes expuestos en ediciones pasadas en el Monasterio de Santa Clara de Carrión.

Asimismo, esta semana está previsto que se inaugure el que cada año muestra la Diputación en su vestíbulo y cuyo montaje corre a cargo de la Asociación Belenista Francisco de Asís.

 

 

Una exposición con tres sedes y cientos de espacios

Una de las muestras más visitadas estas fechas es la que se ubica en el Real Monasterio de Santa Clara de Carrión de los Condes. Este año, con motivo del vigésimo quinto aniversario de la apertura del Museo de las Clarisas, en octubre se inauguró la VIII edición del este ciclo expositivo El Belén, sus personajes y sus símbolos, que ya es toda una referencia belenística a nivel nacional y este año ha alcanzado repercusión internacional.

Aunque el grueso de la colección, más de un millar de belenes, es visitable en Carrión, se pueden ver dos pequeñas muestras similares en Bilbao y Palencia. Así, a la selección de una treintena de misterios que se podrá ver en el Consistorio de la capital, se suman otros 50 belenes que se exhiben en la Exposición del Museo Diocesano de Bilbao y que pertenecen igualmente a la colección carrionesa. Los belenes prestados son inéditos para el público carrionés, ya que han sido donados a las monjas con posterioridad al 15 de agosto pasado, fecha en la que se cerró definitivamente el catálogo de esta VIII edición de El Belén, sus personajes y sus símbolos.