«El voluntariado se basa en los valores de la solidaridad y la confianza mutua y trasciende todas las fronteras culturales, lingüísticas y geográficas. Al brindar su tiempo y sus conocimientos sin esperar una recompensa material, los propios voluntarios se sienten realizados, imbuidos de un extraordinario sentimiento de plenitud». Este mensaje del secretario general de Naciones Unidas, con motivo del Día Internacional de los Voluntarios, muestra la labor de miles de personas que se entregan a los demas sin pedir nada a cambio.

La Asociación Plataforma del Voluntariado de Palencia sabe lo importante que es este tipo de acciones. En la actualidad está formada por 13 organizaciones, cuyos voluntarios trabajan en distintos ámbitos para ayudar a todos aquellos ciudadanos y colectivos que precisan apoyo.

El colectivo tiene 840 voluntarios de las distintas organizaciones que lo forman: Cruz Roja, Asociación Contra el Cáncer, Hospital San Luis, Comité Antisida de Palencia, Asociación de Ayuda al Drogodependiente (Aclad), Afectados de Fibromialgia Asociados de Castilla y León en Palencia, Centro Villa San José, Afecal, Futudic, Acremif, Adecas Guardo, Asociación de Autismo Palencia y Fundación San Cebrián.

Según explica la presidenta de la Plataforma del Voluntariado, Eli Muñoz, el trabajo comenzó hace siete años y desde entonces «hemos crecido mucho». En sus orígenes contaba con cuatro organizaciones y en estos momentos a las trece actuales podrían sumarse otras dos. Respecto al perfil del voluntario palentino, Muñoz hace referencia al hecho de que hace unos años destacaba la presencia de personas jubiladas o prejubiladas que eran relativamente jóvenes, de entre 55 y 60 años.

«Las cosas han cambiado», explica. «La crisis ha propiciado la llegada de muchos jóvenes que tienen más tiempo y que desean entregárselo a los demás». Por su parte, las mujeres siempre han tenido más presencia en el voluntariado que los hombres, «aunque en los últimos años se nota un aumento de varones que desean involucrarse en este tipo de actividades». Añade que «la gente, con la situación económica que se padece, está más sensibilizada y se da cuenta de que lo suyo es poco en comparación a lo que les está pasando a otros que tienen cerca».

Por su parte, Cáritas tiene 270 voluntarios que ayudan a las personas que atraviesan momentos difíciles, mientras que en Manos Unidas trabajan otras 332 personas con este fin.

Respecto al tiempo que una persona dedica a estos fines, la responsable del colectivo que aglutina a gran parte de los voluntarios palentinos indica que «cada uno ofrece su tiempo en la medida de sus posibilidades».

Nuevo local

La Plataforma del Voluntariado de Palencia, que en estos momentos comparte sede con la Asociación Española Contra el Cáncer, podrá trasladarse en unos meses a un nuevo local en el que desarrollar sus actividades.

Es un espacio cedido por el Ayuntamiento de la capital en los bajos del nuevo edificio construido en la calle Gaspar Arroyo.

Para su acondicionamiento cuentan, por ahora, con una ayuda procedente de la Diputación Provincial, con la que podrán costear los materiales para el arreglo, mientras que los propios voluntarios pondrán la mano de obra.

«Esperamos que dentro de un año podamos ya estar trabajando en las nuevas instalaciones y ampliar las actividades que desarrollamos en estos momentos», indica Eli Muñoz, convencida de que el futuro del voluntariado pasa por un aumento en el número de personas que se entregan desinteresadamente a los demás.