Álvarez Tomé sigue imbatido con el Deportivo, que se mantiene en tercera posición, ahora a tres puntos del líder, misma diferencia que mantiene con el quinto clasificado, el Almazán. Los morados son cada vez más sólidos, más bloque, más solidarios. No brilla de forma radiante, pero cada vez tiene menos lagunas, es más equipo. La prueba del algodón le llega ahora, cuando se mida a rivales directos, como Numancia B o Arandina, a domicilio. Momento en el que tiene que demostrar que aparte de un buen once tiene una buena plantilla ante las bajas con las que afronta el siguiente encuentro. Palencia, no ya sólo el Deportivo, necesita un play-off a Segunda División B para recuperar esos miles de aficionados perdidos.

Danisa Cristo Atlético despejó todas las dudas y además a lo grande, 0-3 en el feudo de un rival directo, el Burgos Promesas 2000, al que, de paso, le gana el golaverage particular. Ya deja de ser casualidad que las grandes victorias de esta temporada del equipo morado hayan llegado sin las estrellas. Con independencia del puesto que acabe ocupando al término de la liga hay una medalla que ya se ha colgado el cuadro morado: dar la oportunidad a jóvenes valores palentinos que la han sabido aprovechar y que han dado un paso al frente.

El Becerril tiene desde hace tiempo colgada otra medalla, la de un equipo humilde capaz de codearse con los grandes. Su racha negativa se prolongó con su derrota en Zamora ante el Villaralbo, pero tampoco es para alarmarse. Al fin y al cabo, esta es la situación que se aventuraba a comienzo de temporada, pasando dificultades y mucho sufrimiento para sacar los puntos. Pero al tiempo, la primavera va a llegar en breve al Mariano Haro, cuando retorne Alberto Melero, sin ir más lejos. Este domingo tiene la oportunidad de retornar a la senda del triunfo ante el Burgos Promesas 2000. La salvación matemática está a un paso.