El Guardo Fútbol Sala sumaba su tercera victoria en lo que va de año 2015, la cuarta consecutiva en el grupo I de la Segunda División B, en su visita de ayer por la tarde al feudo coruñés del Ventorillo Fútbol Sala.

Un encuentro en el que los de Luisma Santos comenzaron adelantándose con un tanto de Albertín a los ocho minutos. Sin embargo, pese a enfrentarse al colista de la clasificación (el Ventorillo solo ha empatado uno de sus 13 encuentros, y aún no conoce la victoria este curso), tampoco todo fue un camino de rosas los 40 minutos.

Porque el equipo anfitrión empató enseguida y a los 14 minutos le había dado la vuelta al marcador. Eso sí, un minuto más tarde, superada la relajación palentina, cuatro goles en tres minutos ponían las cosas en su sitio y encarrilaban el triunfo antes de llegar al descanso (2-5).

En el segundo periodo los norteños mantuvieron su diferencia para acabar venciendo por 4-6 a los gallegos en un choque en el que faltó Davicín, lesionado, aunque regresaba Chochi, ausente en las dos jornadas anteriores en el Guardo. No pudo sentarse en su banquillo Luisma Santos, que cumplía el segundo y último partido de sanción. Óscar Díaz, su segundo, dirigió al equipo.

En la próxima jornada el equipo palentino se verá obligado a viajar de nuevo, en esta ocasión a tierras viguesas, donde le esperará uno de los equipos más complicados del grupo, el Mosteiro Bembrive. A falta de su duelo de este fin de semana, el equipo gallego es el segundo de la tabla, aunque los palentinos fueron capaces de empatar en el choque que les midió en la primera vuelta (4-4) tras remontar un claro y desfavorable 1-4.

Los palentinos, que miran hacia la parte alta de la clasificación después de esta buena racha de victorias, tratarán de continuar con su escalada pese al poderío que tiene su rival.