El temporal llegó en forma de nieve al norte de la provincia. La zona de Guardo amaneció con un denso manto blanco de unos 15 centímetros de nieve tras las precipitaciones caídas durante la noche del viernes y el sábado que aún continuaron a lo largo de la jornada de ayer, sin dar tregua.
Algunas carreteras de la zona norte de Palencia permanecieron cortadas durante varias horas para todo el tráfico rodado y en otros casos solo para tráfico pesado.
Así, en los partes remitidos desde la Junta de Castilla y León se informó de cuatro carreteras cerradas por la mañana, aunque unas horas después, ya por la tarde, se reabrieron al menos a los vehículos ligeros. En concreto, se referían a las vías de Cardaño de Abajo y de Arriba, Velilla del Río Carrión, Triollo y Vidrieros.
Hasta una veintena de carreteras permaneció cortada para el tráfico pesado, y para el resto de vehículos era obligatorio el uso de cadenas, tanto de la red provincial como de la regional, todas ellas de la zona norte de la provincia.
Los pueblos con mayores incidencias en sus vías de salida fueron los dos Cardaños, Cervera de Pisuerga, Salinas, Guardo, Santibáñez, Cantoral de la Peña, Resoba, Triollo, Vidrieros, Areños, Rebañal de las Llantas y Brañosera, según recogía el último parte del sábado de la Junta. En términos generales se pide precaución en la circulación por la presencia de nieve en el norte de la provincia.
caudales. Por otro lado, la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) informó ayer de que las intensas precipitaciones caídas estos últimos días, especialmente el viernes, en buena parte de la superficie de la cuenca del Duero, han producido un episodio de avenidas, con crecidas generalizadas en numerosos ríos de la cuenca, siendo la provincia de León la más afectada, seguida de Palencia, Segovia y Zamora. Una veintena de estaciones de control de 14 ríos estaba a primeras horas de la mañana de ayer en situación de alerta (13) o alarma (siete) por las intensas lluvias. En la provincia de Palencia estaba por la mañana en nivel de alarma el Camesa en Villaescusa de las Torres, aunque durante el día la situación mejoró, y en alerta el Lucio en Villallano y el Pisuerga en Herrera.
Fuentes del organismo de cuenca aclararon que la evolución de este episodio dependerá de las precipitaciones que puedan caer en las próximas horas y días, si bien ya se está observando «un descenso de caudales en las cabeceras de los ríos, debido a la disminución de precipitaciones y a la bajada de las temperaturas que a su vez hace bajar la cota de nieve, cuyas crecidas se desplazan aguas abajo, por lo que los tramos medios y bajos podrán seguir aumentando sus caudales y probablemente alcancen situaciones de alerta o alarma en algunos casos».