El Cetece investiga análisis de patrones en el cereal

Carlos H. Sanz
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La Junta subvenciona con más de 188.000 euros un proyecto en el que colaboran empresas relacionadas con la comercialización y trasformación de Valladolid, Zamora y Segovia

En la búsqueda de nuevos métodos de análisis rápidos que permiten conocer los patrones y tendencias de los cereales, el Centro Tecnológico del Cereal (Cetece) ha puesto en marcha un programa denominado March, que ayer presentó Javier Labarga, director de la entidad al delegado territorial de la Junta, Luis Domingo González.

El proyecto March es un estudio metodológico para la optimización de conocimiento por métodos de análisis rápidos como son la correlación del perfil de viscosidad de cereales con parámetros de calidad y la determinación de la degradación proteolítica del trigo por garrapatillo.

Nombres técnicos que, en resumidas cuentas, pretenden conseguir que un ensayo rápido sencillo y reproducible sea capaz de aportar información suficientemente completa como para predecir tendencias y patrones de comportamiento en las muestras de cereal y de sus harinas, con un nivel aceptable de precisión.

análisis del cereal. En el caso de las muestras de harinas de cereal, el objetivo general es correlacionar la información aportada por un método rápido de análisis de harinas -denominado Analizador Rápido de Viscosidad- con otros análisis utilizados tradicionalmente en la caracterización de cereales.

La meta es que a partir del análisis con RVA (por sus siglas en inglés) se pueda obtener una información más completa, y así agilizar el trabajo diario en las empresas del sector cerealista y permitir una toma de decisiones rápida y acertada. Más concretamente, este análisis origina una gráfica -denominada perfil de viscosidad- que registra los cambios de viscosidad del almidón cuando una mezcla de harina y agua se somete a cambios de temperatura que incluyen una etapa de calentamiento hasta 95ºC, seguido de una etapa de enfriamiento.

Pues bien, se ha demostrado que el perfil de viscosidad se ve afectado por otros parámetros y, por tanto puede existir una relación directa entre los resultados obtenidos con el RVA y los obtenidos a partir de otros ensayos utilizados tradicionalmente en la caracterización de cereales, cuya determinación conlleva un tiempo de análisis superior al del ensayo RVA.

análisis del trigo. El otro frente en el que se trabaja en el Cetece es en las muestras de grano de trigo, con el objetivo de detectar la presencia de garrapatillo en el momento de la recepción del grano en la harinera. 

Actualmente, la presencia de esta plaga se detecta mediante la utilización de una variación del ensayo alveográfico, que por su duración (alrededor de 2 horas) no puede realizarse antes de producirse la descarga de los trigos.

Así las cosas, el centro trabaja en una vía que permitirá establecer una correlación fiable y robusta entre la degradación producida por el garrapatillo y los resultados analíticos obtenidos por algunos métodos rápidos de análisis. Las tecnologías seleccionadas para llevarlo a cabo son el RVA, con el que ya se han realizado algunos estudios previos que se revisarán como punto de partida, y el NIR o Analizador de Infrarrojo Cercano.

financiación. Este proyecto cuenta con una inversión total de 251.070 euros, de los cuales 188.303 euros financia la Junta de Castilla y León. El proyecto se desarrollará hasta el 30 de junio de 2020. En él han participado empresas como Emesa, una fábrica de harinas de trigo y otros cereales ubicada en Renedo de Esgueva (Valladolid); Molendum, firma de harinas de cereales sin gluten ubicada en Coreses (Zamora); y Nemesio Herranz Herranz, comercializadora al por mayor de cereales ubicada en Aldea Real (Segovia).

El delegado de la Junta, Luis Domingo González, y el director del Cetece, Javier Labarga, visitaron ayer las instalaciones.