La Cámara Agraria Provincial tiene asegurado su funcionamiento lo que resta de 2014 y el próximo ejercicio.

Lo aseguró su máximo responsable, Honorato Meneses, minutos antes de iniciar un encuentro de trabajo entre la Diputación y los responsables de los Juntas Agropecuarias Locales donde se han completado las inversiones incluidas en el convenio que cada año firman ambas entidades.

«Con lo que tenemos de colchón, este año y el que viene está garantizado el funcionamiento. Eso sí, el próximo año debemos decidir qué modelo queremos», sentenció Meneses.

Aunque hay tiempo para elegir la fórmula que garantice la viabilidad a partir de 2015, el máximo responsable de la entidad cameral mostró su deseo de que se defina «cuanto antes» esa fórmula que permita el funcionamiento de la Cámara. «Una alternativa es la financiación mixta, con aportaciones de las Juntas Agropecuarias y convenios con Instituciones», puntualizó. Esta opción ya se puso sobre la mesa tras la entrada del nuevo equipo que rige los destinos de la Cámara desde enero de 2013.

La predisposición de las Juntas Agropecuarias Locales depende de distintos condicionantes, el principal, según apuntó Meneses, su disponibilidad económica y patrimonial.

«Las hay que disponen de patrimonio y sí están en condiciones de colaborar, y así lo han dicho, y otras que no tienen tanta capacidad», precisó Meneses.

A la financiación de la Cámara se refirió el diputado de Desarrollo Agrario, Urbano Alonso, quien acompañó en el encuentro al presidente de la Diputación y al diputado de servicio, José Antonio Arija. «En un principio nuestra intención es plasmar en los presupuestos de 2015 la colaboración con una aportación de 115.000 euros», avanzó Urbano Alonso.

Ese montante se desglosaría, como en este ejercicio, en dos líneas: 90.000 euros a infraestructuras de Juntas Agropecuarias y los otros 25.000 euros a gastos de funcionamiento (gasto corriente).