Al servicio del paladar

Rubén Abad
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El 'I Encuentro de Cocina Castilla y León en Femenino' arrancó ayer con la presencia de cincuenta profesionales llegados desde diferentes puntos de la Comunidad • Las chefs visitaron la localidad y se acercaron hasta 'La Olmeda'

Unir esfuerzos, hacer piña y evidenciar el importante papel que juegan las mujeres en los fogones profesionales de Castilla y León. Estos fueron los tres conceptos más repetidos ayer en Saldaña durante la jornada inaugural del I Encuentro de Cocina Castilla y León en Femenino, en el que participaron cincuenta profesionales del sector -entre los que se encontraban también algunos hombres- llegados desde diferentes provincias de la Comunidad.

Este evento nace con vocación de entrelazar las manos de las cocineras que trabajan tanto en el medio rural como en las ciudades, mujeres infatigables que lamentable han permanecido invisibles hasta hace no mucho tiempo, que roban un poco de su tiempo para compaginar la vida laboral y familiar mientras hacen lo que realmente les apasiona: cocinar. Chefs de altura y gran potencial que se preparan para estar a la vanguardia de las últimas técnicas de transformación de los alimentos y que luchan día y noche por hacerse un hueco en el mundo de la cocina.

Por ello, este evento culinario arrancó «con vocación de perseverancia en el tiempo, ya que buscamos que sea un encuentro itinerante, entre las diferentes provincias que conforman Castilla y León», apuntó la promotora de la reunión, Isabel Curiel.

El acto comenzó en el Salón de Plenos del Ayuntamiento, donde los participantes fueron recibidos por el alcalde, Miguel Nozal, que alabó el papel de las féminas y enfatizó que «durante demasiado tiempo la cocina doméstica, la del día a día, se ha asociado tradicionalmente a la condición femenina, mientras que la de los restaurantes más destacados, los de las guías, parecería ser una cosa exclusiva de los hombres. Mientras ellas eran solo cocineras, ellos eran prestigiosos chefs».

Asimismo, puso de manifiesto que entre los grandes restauradores «siempre ha habido mujeres, pero es ahora cuando éstas están ganando visibilidad en el sector». Además añadió que el éxito de los platos que elaboran en sus respectivos restaurantes «está directamente relacionado con la calidad de los productos que se utilizan. Esta matera prima se produce casi por completo en el medio rural, por lo que las cocineras estáis contribuyendo a dinamizar un espacio físico en el que muchas personas, cada vez menos, vivimos y aspiramos a seguir viviendo».

En la misma línea se mantuvo el diputado de Promoción Económica, Miguel Sánchez, quien aseguró que el proyecto «evidencia una eclosión necesaria en el mundo de la cocina» y destacó el «gran interés» de esta actividad que ha conseguido reunir en la provincia a cocineras de toda la región.

ACTOS PARALELOS. Una vez completadas las presentaciones de rigor, las cocineras recorrieron los lugares más emblemáticos del casco histórico de la localidad tales como la Plaza Vieja o el Palacio del Marqués en una visita guiada que corrió a cargo del regidor. A continuación se dirigieron hasta la vecina localidad de Pedrosa de la Vega, para conocer la Villa Romana La Olmeda.

El recinto se abrió expresamente para las participantes en esta actividad, un privilegio del que ni siquiera gozó la Duquesa de Alba cuando se acercó hasta el yacimiento con su pareja, el palentino Alfonso Díez.

Ya de vuelta a Saldaña, las restauradoras disfrutaron de varias actividades lúdicas en el Albergue El Valle y compartieron mesa y mantel en Entre fogones, una comida de convivencia que corrió a cargo de Pablo Álvarez, Raúl González, Miguel Fargallo, Roberto Terradillo y Ángel González elaborada con productos de la marca Alimentos de Palencia. En el convite aprovecharon también para debatir sobre la situación del sector e intercambiar opiniones e inquietudes.

Este encuentro en clave femenina se prolongará en el municipio saldañés hasta el próximo día 22 con diferentes actividades en las que estarán presentes no solo cocineras de las nueve provincias de Castilla y León, sino también bodegueras, enólogas, productoras, cortadoras de jamón y responsables de sala, «para demostrar a la sociedad palentina que las mujeres sabemos desenvolvernos muy bien en cualquier ámbito de la gastronomía», concretó Curiel.