'Docomomo' alega contra la rebaja de protección en plaza de León, 4

diariopalentino.es
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La Fundación pide que las actuaciones que se acometan en el edificio se hagan con mecanismos que garanticen la preservación de los valores arquitectónicos y se descarte el vaciado

El Sanatorio Jesús  Nazareno del Dr. Higelmo, obra de Larrucea y Ferrán -plaza de León, 4-, figura entre las obras significativas del Movimiento Moderno en España y Portugal, documentada por la Fundación Docomomo Ibérico, que coordina en los territorios citados los objetivos  de la organización internacional  creada en 1989 para inventariar, proteger y divulgar ese patrimonio arquitectónico. La modificación del PGOU en el ámbito delimitado como URPI-8, correspondiente al Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Casco Antiguo, y Modificación del Catálogo rebaja el grado de protección Ambiental I a Ambiental  II, entre otros, a esa edificación. Así las cosas, la Fundación Docomo Ibérico acaba de presentar una alegación (hasta el 14 de agosto está abierto el plazo de información pública), en la que pide la desestimación de la modificación en lo que se refiere al edificio de la plaza  de León, 4; que se mantenga y garantice el estado de conservación y que las actuaciones que se acometan se realicen mediante mecanismos que garanticen la preservación de los valores arquitectónicos del mismo, así como su materialidad y autenticidad, descartándose el vaciado.

La Fundación Docomomo Ibérico destaca el «elevado interés» arquitectónico del Sanatorio Jesús  Nazareno del Dr. Higelmo, de «importancia» para el patrimonio arquitectónico moderno español. Recoge la ficha Docomomo, que firma Alberto Combarros, que «sorprende la construcción en 1940 de este edificio, siguiendo los postulados del racionalismo, justo después de finalizada la Guerra Civil». Explica que su composición es atractiva y representativa de la arquitectura racionalista de cuerpos volados con ventanas corridas y en esquina, y fachadas independientes que, a modo de piel, recubren el edificio. «El sistema constructivo en años de tanta escasez es francamente ingenioso y presto a ejecutar la construcción con un mínimo de cemento y hierro. No se corresponde exclusivamente con un sistema de muro de carga, perimetral, sino que desarrolla un sistema unitario e interrelacionado de tabiques portantes con un singular forjado cerámico de doble capa que rigidiza el interior y permite el desarrollo de las distintas plantas, mediante un sistema de construcción próximo al denominado a la catalana». Comenta también Alberto Combarros que tanto la imagen como la situación, en la entrada a la calle Mayor de Palencia, desde el Parque de Los Jardinillos, «hacen de este edificio un referente de la ciudad a lo largo de los tiempos».

En su alegación, la Fundación Docomomo Ibérico manifiesta  que el derribo y posterior reconstrucción de la fachada «no salvaguarda en ningún caso los valores del conjunto, ni su autenticidad», tal y como «aconsejan» las normas y cartas sobre el patrimonio e intervención reconocidas internacionalmente -carta del Restauro, 1932; carta de Venecia, 1964; Normas de Quito, 1967; documento  Nara sobre la autenticidad, 1994; y la declaración de la Unesco relativa a la destrucción intencional del patrimonio cultural. También se menciona la Asamblea Nacional de Icomos, en 2003, cuando se señaló que «el valor del patrimonio arquitectónico no reside únicamente en su aspecto externo, sino también en la integridad de todos sus componentes como producto genuino de la tecnología constructiva propia de la época. De forma particular, el vaciado de sus estructuras internas para mantener solamente las fachadas no responde a los criterios de conservación».