El PSOE de Castilla y León expresó hoy su “severa preocupación” por los resultados en las elecciones andaluzas y la entrada de Vox en su Parlamento, pidió un “ejercicio serio de reflexión” en la izquierda y defendió su oposición útil en la Comunidad para que los ciudadanos confíen en la “alternativa decente” de los socialistas liderados por Luis Tudanca, en un momento en que "soplan vientos de cambio", en declaraciones recogidas por Ical.

La secretaria autonómica de Organización, Ana Sánchez, trasladó ese mensaje al término de la reunión del Comité Electoral Autonómico en el que se valoraron los datos de los comicios andaluces y calificó de “mal resultado” pese a ganar en siete de las ocho provincias, pero declinó culpar a Susana Díaz por su “aventura” en las primarias estatales como poco antes argumento el alcalde de Valladolid y portavoz del PSOE, Óscar Puente. “Sería una falta de respeto”, anotó Sánchez, que si envió todo el apoyo a los socialistas andaluces.

La dirigente autonómica abogó, en la lectura de los resultados, por un “ejercicio serio de reflexión” en la izquierda para que se vea que son útiles en la resolución de los problemas de los ciudadanos y miró a la “desmovilización fruto de un descontento y cabreo”, en unos argumentos que afirmó que van a trasladar a los órganos federales cuando éstos sean convocados.

Tras manifestar que están “preocupados y alarmante y severamente preocupados” por la fuerza con la que ha entrado Vox en el Parlamento de Andalucía, indicó que son conscientes de que la “fragmentación política ha llegado para quedarse” y confió en que PP y Ciudadanos, después del “fragor” de anoche, “enfríen los ánimos” y no sean capaces de pactar con el partido que lidera Santiago Abascal y “blanqueen” así a la extrema derecha.

No obstante, afirmó que “soplan vientos de cambio” y esa es la premisa con la que trabaja, también después de lo ocurrido en Andalucía, el PSOE de Castilla y León, para dar una alternativa a la Comunidad después de 30 años de gobierno del PP, en un punto en que reconoció que se parecen ambas comunidades al tener un gobierno del mismo partido desde hace años, aunque en lo demás observó realidades diferentes. 

Sánchez puso en valor la oposición útil de su partido y pidió que se confié en él como alternativa de cambio de gobierno y se detuvo en algunas de las últimas actuaciones, como su iniciativa que ha motivado que la Junta haya anunciado la bajada de tasas universitarias, la dotación a todas las provincias de unidades de ictus con su propuesta aprobada en las Cortes, la solución a la crisis de Vestas o el pacto fiscal con sindicatos y partidos de izquieda.

La secretaria de Organización contrapuso la posición de su partido con una “derecha que no se entera” y con la “subasta electoral” de Alfonso Fernández Mañueco al prometer compromisos incumplidos y otros asuntos “surrealistas”, donde mencionó las medidas para fomentar la natalidad cuando son los “campeones de la despoblación” de la Comunidad y ha sido el PSOE quien lo ha puesto en la agenda nacional.

“No sabemos a qué PP dirigirnos”, lamentó la dirigente socialista, que se preguntó si es el “moderado” de Juan Vicente Herrera que”enmienda la plana” en su defensa del estado de las autonomías y el rechazo a centralizar competencias, en lo que afirmó que están con el presidente de la Junta, o la del “señor Mañueco, escorándose hacia una derecha más radical”.

El PSOE de Castilla y León trabaja por el cambio y para evitar la entrada de Vox en las instituciones en las próximas elecciones autonómicas y locales, argumentó Sánchez, que insistió en que PP y Cs no sean capaces de “blanquear” a esa formación con un pacto para gobernar en Andalucía y desbancar del poder a Susana Díaz. Aunque es un "día difícil en Castilla y León las cosas no han cambiado", aseveró.