La nueva etapa en la construcción de las Líneas de Alta Velocidad en la provincia de Palencia es ya una realidad. Tras meses en los que la actividad constructiva se ha visto mermada y aletargada debido a la crisis, y una vez dados por concluidos todos o casi todos los trabajos en la plataforma entre Valladolid, Palencia y León, ese camino de 14 metros de ancho comienza ya a cubrirse con los elementos que le transformarán de una simple senda millonaria a una Línea de Alta Velocidad Ferroviaria capaz de albergar circulaciones de hasta 350 kilómetros por hora (300 con viajeros).

Desde hace unos días y varias semanas después que en algunos tramos de la provincia de León        -por eso de la operatividad y logística- las primeras traviesas que sujetarán los raíles ferroviarios están siendo repartidas ya en territorio palentino. Más concretamente en los entornos de la Base de Montaje y acopio de la localidad de Villada. Es el primer paso antes de que comience el montaje en sí de la superestructura: raíles, balasto, catenaria y sistemas de seguridad.

Ayer mismo varias decenas de camiones formaban una hilera  dentro de la traza de la futura Línea para dejar los bloques de hormigón pretensado de las traviesas. Éstas eran apiladas por una grúa en pequeños promontorios en los lugares marcados con pintura naranja. Una colocación milimétrica, porque esto facilitará el montaje de la vía en los meses venideros.

La llegada de estas traviesas es consecuencia de la adjudicación hace varios años del suministro de un lote para esta línea. Alcanzan ahora su definitiva ubicación una vez que Adif, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias dependiente del Ministerio de Fomento-, ha licitado hace unas semanas los contratos de montaje y está pendiente de adjudicarlos. 

Así, las empresas que ganen los concursos valorados en un total de 38,5 millones de euros ya tendrán sobre el terreno parte del material que deben utilizar para dar forma a la LAV Valladolid-Palencia-León. Y en esa labor tendrá una importante relevancia la Base de Montaje de Villada, totalmente preparada y lista ya para recibir más raíles de 270 metros, así como toneladas del balasto que amortiguará, asentará y drenará la vía.

De momento, alberga una pequeña partida de raíles, algunos de ellos llegados en mayo de 2011, y adjudicados a ArcelorMittal España y transformados en barras de 270 metros por la vallisoletana Redalsa.

 

doble vía y vía simple. Como ya ocurriera con la Línea de Alta Velocidad entre Venta de Baños y Burgos, Adif ha decidido cambiar la configuración de la línea. Al menos, la forma en la que funcionará en un principio y ante su eventual inauguración para el 2015. Año electoral, por otro lado.

Un cambio que se ha plasmado en los contratos de montaje de vía de los tres tramos en los que se ha dividido la LAV desde Valladolid a León: Valladolid-Palencia, Palencia-Villada y Villada-León.

No se abrirá totalmente en vía doble como estaba proyectada (salvo enlaces, ramales y travesía por la capital palentina). Habrá tramos en vía doble y otros en vía única. 

Desde Adif manifestaron ayer que «el objetivo de esta decisión (dos tipos de tramos) es agilizar las obras al máximo y de esta forma poder cumplir los compromisos lo antes posible, de acuerdo con las disponibilidades presupuestarias». Esto es, llegar a Palencia y León en 2015, ajustándose a un presupuesto que no daría para abrir la línea en doble vía. Eso sí, señalan que «la  LAV Valladolid-Venta de Baños-Palencia-Leon se construirá finalmente de acuerdo a los parámetros proyectados», con lo que dan a entender que se trata de una actuación provisional.

De esta forma se aligeran costes de montaje y mantenimiento y, en paralelo con el ataque de la obra desde tres frentes diferentes, se podrá abrir la Línea de Alta Velocidad en el último plazo comprometido por la ministra de Fomento, Ana Pastor: 2015. Eso sí, también hay que tener en cuenta que una vía significa menor capacidad para albergar circulaciones y, posiblemente, también ciertas limitaciones de velocidad. Actualmente, nueve trenes aptos para circular por Líneas de Alta Velocidad (Alvia o Intercity)  cubren este recorrido por sentido.

 

Cambios. Los cambios se han dado sobre todo en el tramo entre Palencia y León, puesto que entre Valladolid (salida norte) y Palencia se mantiene la configuración de vía doble, al soportar o tener la previsión de soportar un mayor número de circulaciones en Alta Velocidad que desde Palencia a León.

Así, entre la capital vallisoletana y Palencia habrá un tramo de doble vía de 37 kilómetros y dos ramales, uno para cada sentido, de 6 kilómetros en vía única (del nudo de Venta de Baños a Palencia).

Entre Palencia a León es donde están las novedades. El pliego de Cláusulas Administrativas Particulares de Proyecto de Montaje de Vía señala que entre Palencia y Villada se implantarán 25,3 kilómetros de vía única y 17 de vía doble. Entre Villada y León serán 40 de vía única y 21 de vía doble.

Según diversas fuentes consultadas, el tramo de vía doble estará ubicado en el centro del recorrido entre Palencia y León. Esto es, en  los entornos de Villada. Desde Palencia hasta allí la circulación será en vía única. Una vez pasado el tramo de 30 kilómetros en vía doble, se volverá a vía simple hasta las inmediaciones de León, donde montarán dos vías para dar acceso a la estación. 

Esta configuración permitiría salvar algunas de las limitaciones de circulación propias de una vía única. La  zona de vía doble se usará para cruzar los trenes en sentidos inversos. En total, de los casi 150 kilómetros entre Valladolid y León, 75 serán en vía doble y la otra mitad en vía única, al menos durante un período inicial, y para que los AVE puedan aterrizar en 2015 en Palencia.

 

El paso por Palencia, en simple