Comisiones Obreras (CCOO), la Unión General de Trabajadores (UGT) y la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F) de Palencia anunciaron ayer su decisión de convocar una concentración el próximo martes, 15 de julio, a las 12 horas, en la Subdelegación de Gobierno de Palencia con el propósito de cambiar la orientación de las políticas públicas de personal. Los tres sindicatos exigen a las distintas administraciones públicas (central, autonómica y locales) la recuperación del Diálogo Social y la apertura de la mesa general de negociación para cambiar las condiciones laborales de los empleados públicos. La secretaria general de la Federación de Servicios Públicos de UGT de Palencia, María de Rozas, reclamó medidas para atenuar la situación de millones de empleados públicos y frenar la destrucción del empleo, el empeoramiento de sus derechos laborales, económicos y profesionales y el deterioro de los Servicios Públicos. «Es necesaria la defensa de políticas públicas de igualdad de género», comentó la secretaria. Por su parte, la representante de la Ejecutiva provincial de CSI·F, Carolina Gómez, exigió una negociación con las administraciones para la «recuperación de todos los derechos que han sido robados por la crisis, como es el caso de la paga extra». «Se están ensañando con el empleado público, que no es el responsable de la crisis», añadió. El secretario de Formación y Acción Sindical de CCOO, Santiago González, criticó los «sueldos de subsistencia, el aumento de la jornada, la destrucción de empleo público y la privatización de un buen número de servicios que eran públicos. «Es el momento de pedir que vuelva la negociación colectiva y nos devuelvan nuestros derechos», afirmó González. Los representantes sindicales explicaron que no solo los empleados públicos son los que sufren los recortes sino también toda la ciudadanía, ya que se han deteriorado servicios públicos, como la educación. UGT, CCOO y CSI·F no están dispuestos a retroceder en el camino hasta conseguir el Diálogo Social para mejorar las condiciones los empleados públicos, la generación de empleo público estable y con derechos para garantizar el estado de bienestar. Los sindicatos también reclamaron unos servicios públicos de calidad para la ciudadanía. El manifiesto de los sindicatos tiene como prioridades aumentar el empleo público y los salarios, frenar la reforma laboral en las administraciones y la defensa de las políticas públicas de igualdad de género y prevención de riesgos.