Lewis Hamilton (Mercedes), líder del Mundial de Fórmula Uno, se llevó el premio de la ‘pole position’ en Bélgica arriesgando en su última vuelta sobre la pista mojada, donde fue un segundo más rápido que el alemán Sebastian Vettel, al que ‘robó’ el primer puesto.
Su quinta ‘pole’ en Spa-Francorchamps la consiguió el británico contra los augurios que apuntaban a Ferrari como el coche más rápido durante los entrenamientos, y aliado con el pronóstico meteorológico: la lluvia que abrió la ‘Q3’ y cesó en los instantes finales, permitiéndole mejorar su registro en el último intento. A la mejora del asfalto, Hamilton le añadió un pilotaje genial, asumiendo riesgos para buscar la ‘pole’, hasta el punto que Vettel, que hizo su giro definitivo por detrás -y por ende, con las mismas o mejores condiciones- se quedó muy lejos: 726 milésimas más lento. Un mundo.

En la formación de salida, los españoles Carlos Sainz (Toro Rosso) y Fernando Alonso (McLaren) saldrán decimocuarto y decimoquinto, respectivamente, tras una mala clasificación en la que el madrileño tuvo problemas de agarre y el asturiano tuvo que resignarse de la debilidad de su monoplaza en este tipo de circuitos.