La Peña Taurina Palentina inició el pasado jueves su XXXII Ciclo Taurino-Cultural que, con sus coloquios semanales, va a tratar de llevar la tauromaquia a toda la afición palentina. En esta primera reunión, después de saludar a todos los asistentes  por parte del presidente de la Peña, tomó la palabra el periodista y cronista taurino Pepe Estévez para, desde su punto de vista como él mismo señaló, hacer un análisis de cuanto ha supuesto la temporada 2014, recién terminada.

No quiso, por no abrumar al auditorio, llenar de datos y números su intervención y así estructuró su charla en distintos aspectos. Por una parte se refirió a  circunstancias que han podido influir en el desarrollo de la temporada como fue el enfrentamiento entre determinadas figuras -el llamado G-5- con la empresa de Sevilla, que condicionó la composición del cartel de la Feria de Abril. 

«Este desencuentro pudo haber supuesto una oportunidad para traer una nueva concepción en la organización de la Feria. No fue así y los resultados fueron los esperados: decepción en los aficionados por la mediocridad de los carteles», comentó.

En cuanto a la actuación de los profesionales durante el 2014, destacó sobre todos a Miguel Ángel Perera, «que ha vuelto a encontrar el sitio que le catapultó al estrellato hace unos años». Junto a él señaló la buena temporada de El Juli y también de Talavante. 

Recordó también a otros toreros como a Iván Fandiño, «que a sangre y fuego se está abriendo paso para llegar a lo mas alto»; y a Miguel Abellán, que ha protagonizado una vuelta a los ruedos llena de dignidad. De los toreros castellanos y leoneses destacó a Juan del Álamo, del que espera que este año de el salto definitivo y, por fin, abra la puerta grande de Las Ventas.

Respecto al escalafón de los novilleros se quejó del poco conocimiento que los aficionados tienen de los novilleros, culpando de ello a la poca programación de novilladas que se hace -«es una pena», dijo-, porque hay novilleros con una gran proyección que necesitarían mas oportunidades. 

Destacó a José Garrido, el que mas ha toreado; a Álvaro Lorenzo, del que afirmó tener un concepto del toreo que le puede llevar lejos; y se refirió también a Francisco José Espada, Filiberto y al salmantino Alejandro Marcos. También tuvo un recuerdo para el novillero palentino Diego Fernández, mal tratado por las empresas cuando ha demostrado tener valores muy estimables.

Sobre el escalafón de los rejoneadores vino a decir que el eterno mandato de las dos máximas figuras, Pablo de Mendoza y Diego Ventura, puede estar cerrando el paso a otros que pudieran aportar mayores novedades. Se refirió a nuestro rejoneador Héctor Barcenilla, al que deseó que con un alternativa pueda abrirse camino entre los grandes.

En el capítulo de toros destacó la ganadería de Garcigrande donde, al margen del denostado encaste Domeq, Justo Hernández ha demostrado haber  encontrado el toro que está dando satisfacción a todos. «A toreros porque les permite desarrollar su arte y a los aficionados, porque pueden disfrutar de su bravura». Y como ganadería emergente, señaló la de Pedraza de Yeltes, donde la labor de José  Ignacio Sánchez se está dejando ver.

Quiso también hacer una llamada a la situación de la Fiesta refiriéndose a alguna feria importante como la de Bilbao cuya deriva descendente tiene que llevar a hacer alguna reflexión. «Los empresarios ya se han manifestado pero no aportan ninguna solución. Creo que ha llegado la hora de sentarse a la mesa todas las partes implicadas, la Administración la primera, porque los gastos fijos que conlleva un espectáculo taurino son inasumibles y todo esto hay que tratarlo».

El próximo jueves, día 27, el invitado será Jorge Fajardo, presidente de la Unión de Federaciones Taurinas de Aficionados de España (Uftae), que hablará sobre La situación actual de la Fiesta vista por un aficionado.