La cifra de ahorradores en España volvió a disminuir este año a los niveles registrados en 2016, hasta el punto de que solo el 42,7% de los ciudadanos consigue guardar para el futuro menos de 200 euros mensuales, frente al 54% que se computó en 2017. Sin embargo, siete de cada 10 de esas personas que sí reservan parte de sus ingresos considera que invertir en la compra de una vivienda es una opción segura y, de hecho, hasta un 22,2% de ellos la adquiere con el fin de destinarla a un alquiler posterior.

Estas son las conclusiones que pueden extraerse del quinto estudio de comparación online que realiza anualmente el portal Rastreator.com, un informe que pone de manifiesto que las propiedades inmobiliarias ocupan el cuarto puesto en la lista de las mayores motivaciones que tienen los españoles para ahorrar. En concreto, un 61% lo hace para poder hacer frente a los posibles imprevistos que puedan surgir, seguido del 50% que espera destinarlo a viajar, del 39% que tiene en mente un colchón para la jubilación, y del 28,2% que quiere adquirir un inmueble. 

La caída de la cifra de ahorradores en el país se produce, como asegura el informe, como consecuencia de la consolidación de la mejora de la economía nacional en el último año, lo que ha reactivado el crecimiento del consumo y, por extensión, ha generado una menor propensión a reservar parte de los ingresos entre la ciudadanía.