En el paraje Páramo Llano, perteneciente al municipio de Fuentes de Valdepero, aparecieron durante el pasado fin de semana los cadáveres de dos cuervos (Corvus corax) y un busardo ratonero (Buteo buteo), muertes  que han tenido como causa más probable la electrocución ya que las aves estaban debajo de una instalación eléctrica. En esta misma instalación en años anteriores se encontró un ejemplar de águila calzada (Hieraaetus pennatus) también con signos claros de electrocución, según informó Ecologistas en Acción. La organización ecologista pedirá a la Junta de Castilla y León que tome las medidas necesarias para evitar la muerte de más aves y que inicie los trámites oportunos para requerir al propietario de la instalación la corrección del poste y que quede aislado adecuadamente. De hecho, solicitará al Gobierno regional que elabore un inventario de los tendidos más peligrosos y publique un listado de sus zonas de protección. Por otro lado, el cadáver de un oso pardo (Ursus arctos) ha sido hallado el pasado sábado en una zona de monte del municipio de Cillorigo de Liébana, según informó la Consejería de Medio Rural, Pesca y Alimentación del Gobierno de Cantabria.  Aparentemente se trata de un ejemplar adulto y se encontraba en una zona de drenaje en avanzado estado de descomposición. 

El presidente de la Fundación Oso Pardo, Guillermo Palomero, aseguró ayer a DP que hay que esperar a los resultados de la necropsia para saber las causas de la muerte. 

Hay que recordar que un oso resultó herido durante una cacería en noviembre del pasado año en la zona de Casavegas, sin que se hayan encontrado hasta ahora indicios de su paradero.