El holandés Max Verstappen (Red Bull) fue ayer el vencedor del Gran Premio de Austria y el alemán Sebastian Vettel (Ferrari) recuperó el liderato del Mundial de Fórmula uno al término de una carrera en la que el desgaste de los neumáticos y los problemas mecánicos fueron decisivos.
Detrás del neerlandés, que ganó su cuarta prueba desde que está en el ‘Gran Circo’, entraron los Ferrari del finlandés Kimi Raikkonen y el alemán, que volvió a lo más alto del campeonato después de que los Mercedes del británico Lewis Hamilton y el finlandés Valtteri Bottas abandonaran por problemas mecánicos.
Fernando Alonso, que había salido desde el ‘pit lane’ por una penalización, acabó octavo y volvió a entrar en los puntos después de tres carreras sin hacerlo, y Carlos Sainz (Renault) fue duodécimo.