La decisión anunciada el pasado lunes por el presidente Pedro Sánchez de aparcar la reforma del modelo de financiación autonómica -argumenta que no da tiempo en lo que queda de legislatura- sigue generando un fuerte malestar entre las formaciones que le auparon al poder apoyándole en la moción de censura contra Rajoy. Así, ayer,  Compromís, que comparte Gobierno con los socialistas en la Comunidad Valenciana, registró en el Congreso la misma proposición no de ley que el PSOE presentó en 2016, urgiendo a reformar el sistema. 

La presentación de esta iniciativa, que se pretende votar en otoño en el Pleno del Congreso, busca medir la «coherencia» de los socialistas con el mismo texto que registraron hace dos años y que la Cámara dio luz verde en vísperas de la investidura de Rajoy, y que entonces recabó el respaldo de todos los partidos salvo la abstención de ERC y Convergencia (ahora PDeCAT). 

Los nacionalistas levantinos instan al Ejecutivo central a iniciar ya los trabajos para reformar el sistema, a garantizar la igualdad y la suficiencia financiera de todas las autonomías y a compensar los déficits generados en estos años pasados. También se le exige que se establezcan objetivos de estabilidad de forma transparente y con un reparto equitativo entre Administraciones, así como que rinda cuentas ante el Congreso del trabajo realizado en el plazo de seis meses. 

Para el diputado de Compromís Ignasi Candela, la moción de censura salió adelante «por coherencia» y, en ese sentido, cree que el líder progresista «no estuvo nada afortunado» cuando confirmó el pasado miércoles que el nuevo Ejecutivo renuncia a reformar la financiación autonómica en lo que queda de legislatura.