El presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, salió ayer «satisfecho por el trato y el tiempo dedicado» por Pedro Sánchez en su primera visita a La Moncloa, seis meses después de la llegada del mandatario socialista a la Presidencia del Gobierno. Esta satisfacción, sin embargo, no fue completa, ya que la densa agenda de propuestas que llevaba el dirigente castellano y leonés no encontró compromisos concretos, aunque sí compartieron «sensibilidad» por muchos de los asuntos pendientes.
Tras un repaso general, este primer encuentro ha servido para fijar a partir de ahora entrevistas y contactos «inmediatos» con los ministerios para avanzar en materias concretas. Entre esas reuniones se encuentran las anunciadas con los ministros de Fomento, Economía y Transición Ecológica, así como la convocatoria el próximo mes de enero de la Comisión de Cooperación entre el Estado y la Comunidad.
Herrera inició su comparecencia, tras más de hora y media de ‘cara a cara’ con Sánchez, reconociendo que su principal reivindicación, la «urgente y perentoria» reforma de un insuficiente modelo de financiación autonómica había recibido una rotunda respuesta del presidente del Gobierno: «la actual situación de bloqueo político no permite ser optimista sobre una negociación viable», según contó el propio dirigente castellano y leonés, quien lamentó que no haya «un horizonte razonable» por la falta de «grandes acuerdos» en el Congreso de los Diputados.
El dirigente castellano y leonés recordó al mandatario socialista que éste fue uno de los acuerdos de la Conferencia de Presidentes, celebrada en enero de 2017. Otro de los compromisos adoptados entonces era la aprobación de una estrategia nacional frente al reto demográfico, que Sánchez confirmó que se presentará en la próxima primavera.
«El presidente del Gobierno ha sido claro y franco», afirmó Herrera en relación a la urgencia de la reforma de la financiación que calificó de «perentoria, imprescindible y necesaria» ante el déficit, endeudamiento e infrafinanciación de las comunidades, pero también recordó a los grupos políticos que de ello depende la sostenibilidad del Estado del Bienestar. «Es algo realmente serio», apuntó.