Mas asegura que ERC solo será un acompañante en el plan soberanista

Agencias
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El 'president' reclama a los ciudadanos concentrar el voto independentista en CiU, porque su programa requiere de una formación con un peso y una centralidad «suficiente para liderarlo»

Mas asegura que ERC solo será un acompañante en el plan soberanista

Falta poco más de un mes para que tengan lugar las elecciones autonómicas en Cataluña y los partidos han entrado de lleno en una precampaña centrada en la independencia promulgada el pasado 11 de septiembre durante la celebración de la Diada. Apenas un día después de conocerse los resultados de los comicios en Galicia y el País Vasco, el protagonismo se centró ayer en el presidente de la Generalitat y candidato de CiU a la reelección, Artur Mas, que apeló a concentrar el voto soberanista en  su federación y dejó a ERC un papel de «acompañamiento».

Consciente de que a su proyecto independentista se puede sumar la formación republicana, el líder convergente admitió que Esquerra ya defendía el proceso secesionista con anterioridad, pero remarcó que su plan solo puede salir adelante con amplias mayorías sociales, y éstas «no han estado en ERC».
Para Mas, en el momento en que este sentimiento ha sido más transversal, incorporando sectores del PSC e ICV-EUiA, el papel del partido de izquierdas después de las elecciones del 25 de noviembre «difícilmente será de liderazgo, sino de acompañamiento». 
Por eso, y a la espera del resultado de las urnas, destacó que lo que se analizará es la mayoría soberanista que sume el próximo arco parlamentario y si hay una formación con el peso y centralidad suficientes para encabezar el proyecto que se quiere llevar a cabo. 
«Este proceso no se puede liderar desde la fragmentación», avisó el president, por lo que reclamó el apoyo de los ciudadadanos que, en otras circunstancias, no elegirían a CiU para afrontar este nuevo camino. 
Las palabras de Mas no sentaron bien en el seno de ERC, cuya secretaria general, Marta Rovira, respondió al mandatario que su partido rechaza ser una «muleta» de los convergentes en la cita del 25-N y le disputará el voto independentista.
«Nosotros mandamos un mensaje muy explícito: ni fallaremos ni nos temblarán las piernas en el proceso de transición hacia la república catalana», aseveró.
De hecho, según agregó, ERC no aspira a acompañar a «una CiU soberanista», sino «a ser la alternativa de izquierdas» a la federación conservadora.
Por su parte, el presidente de Esquerra y candidato a la Presidencia, Oriol Junqueras, avisó de que su partido se conjurará para «intentar repetir en Cataluña tanto como sea posible» el papel que ha tenido Bildu en las elecciones vascas, convirtiéndose en segunda fuerza y dejar de ser, así, la quinta.
Además, y en referencia a esos comicios, Artur Mas instó al Estado a tomar nota del resultado en Euskadi y advirtió de que «negar los problemas» solo aviva el nacionalismo y auguró que el triunfo del PNV y la irrupción de la izquierda abertzale como segunda fuerza política puede ocurrir también en Cataluña.
«Que tomen nota de ello», amenazó el president, quien apeló al Gobierno central a entender la «coyuntura vasca y catalana».