Tras tres años y medio de estancia en Palencia y de investigación en la Etsiiaa donde ha realizado su doctorado, Temesgen Desalegn volvía el viernes a Etiopía.

El flamante doctor defendió su trabajo el pasado día 20 de febrero con un resultado muy satisfactorio, un sobresaliente cum laude, que ha conseguido con «mucho trabajo y esfuerzo», reconoce.

Este investigador de 40 años, con mujer e hijos y que habla cinco idiomas, recaló en Palencia en 2011 tras otras estancias en países como Alemania donde estuvo un año y medio e India (dos años y medio) donde ha ido completando su formación hasta la realización del doctorado en la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias.

Este nuevo paso le permitirá ascender en su trabajo como investigador que desempeña en el Holetta Agricultural Research Center dependiente del EIAR (Ethiopian Institute of Agricultural Research).

Temesgen explica que cuando llegó a Palencia «ya tenía trabajo en Etiopía, en la misma empresa que ahora, pero ahora voy a estar en un nivel muy superior». Al respecto, explica que realizar un doctorado  en Etiopía es muy difícil. «En toda África en general. No es como aquí en Europa, por tanto tener un doctorado en Etiopía es muy importante».

Deseoso de volver a su país, asegura haber disfrutado mucho de su estancia en Palencia «y el esfuerzo ha merecido la pena». Se muestra muy agradecido por la ayuda que desde que llegó a la ciudad obtuvo, «incluso cuando no sabía nada de español». «Han hecho mi vida aquí muy cómoda y ha resutado fácil adaptarme».

 Temesgen Desalegn destaca los avances que en los últimos años se han conseguido en las relaciones entre España y Etiopía que, precisamente, han permitido que él pudiera venir a la Etsiiaa a realizar su doctorado.

Explica que su tutor en la Escuela  tiene un proyecto a desarrollar entre Etiopía y Europa con el que va a colaborar. «El principal objetivo es mantener esta relación entre el Instituto y la Universidad de Valladolid>», indica.

Asegura además que la presencia de investigadores etíopes seguirá en la Etsiiaa gracias a los distintos programas que unen a los dos organismos. De hecho, todos proceden de la misma empresa dependiente del Estado, Ethiopian Institute of Agricultural Research, aunque cada uno de un centro de investigación.