El juzgado de instrucción número 1 de Cervera de Pisuerga ha condenadoal pago de una multa a un vecino de Cantabria, de 66 años, como autor responsable de un delito leve de maltrato animal, después de que dos perros de su propiedad murieran el pasado verano en el interior de un vehículo debido a las altas temperaturas a las que estuvieron expuestos durante horas. 

El suceso tuvo lugar durante la ola de calor de finales de julio y comienzos de agosto en el aparcamiento de un restaurante de la localidad de Brañosera, mientras su dueño estaba comiendo en un establecimiento. El automóvil se encontraba sin ventilación y con las ventanas totalmente cerradas. 

Tras ser alertado, el dueño sacó a los dos perros del vehículo con la mala suerte de que uno ya había fallecido y el otro animal tenía la respiración muy débil. A pesar de intentar reanimarle, el perro falleció.

La Guardia Civil procedió a instruir las correspondientes diligencias supuestamente por no haber adoptado las medidas adecuadas y obligatorias para evitar su muerte.

Además, la Benemérita informó de que los canes carecían de la documentación sanitaria en vigor. 

Por lo demás, el dictamen puede ser recurrido en apelación ante la Audiencia Provincial.