Asaja Palencia denunció ayer un nuevo ataque de lobos que ha acabado con la vida de ocho ovejas en una explotación de la localidad de Abia de las Torres.

El dueño de la explotación ha cifrado los daños en unos 1.600 euros, a la vez que muestra su indignación por «la impunidad con que se repiten este tipo de sucesos, a plena luz del día», como ha ocurrido en su granja.

Una pérdida económica a la que hay que sumar, según señalan los servicios técnicos de Asaja, las que provocan los abortos de los animales atacados, las pérdidas de producción de leche en todo el rebaño, las dificultades que se producen en el manejo diario del rebaño tras el ataque y la escasa viabilidad de los lechazos cuando las madres han sido víctimas del lobo. Recogiendo las denuncias de éste y otros ganaderos afectados por los ataques del lobo, Asaja recuerda que la Junta «sólo compensa con 20 euros (que corresponden a la franquicia y el lucro cesante) la muerte de un animal, frente a la valoración que hace Agroseguro, que sitúa en aproximadamente 140 euros, mientras que el valor real puede rondar los 200».

PETICIÓN DE MEDIDAS. Por lo tanto, además de exigir a la Junta medidas para acabar con estos ataques, que, según la organización agraria, se están registrando en territorios donde nunca han existido lobos, rechaza la obligación de suscribir un «seguro injusto y que no le corresponde asumir al ganadero».

«Debe ser la Junta la que abone, sin más, los daños, tanto de bajas como de lucro cesante, que se produzcan en las ganaderías por el ataque del lobo», señala la organización y añade que «un ganadero que ve esquilmada su explotación y su patrimonio necesita que se le indemnice rápida, justa y eficazmente, sin más consideraciones».