El pabellón de deportes de Guardo se transformó por unas horas en un gran escaparate para las asociaciones, colectivos y clubes que prestan sus servicios en el municipio montañés. Un punto de encuentro para las entidades que suman decenas de seguidores, y para las más modestas. También para las de nuevo cuño y para aquellas que llevan décadas trabajando de manera altruista en el occidente de la Montaña Palentina.