Denuncia a la alcaldesa por abrir la puerta del almacén de la Estación de Autobuses

Marta Redondo
-

La persona que regenta el bar la acusa de «reventarla» para realizar una inspección «sin presentar ningún escrito» que avalase la acción

La regidora de Cervera de Pisuerga ha sido denunciada por las personas que regentan el bar de la Estación de Autobuses de la localidad tras un altercado sucedido el  19 de mayo,  hechos que fueron puestos al día siguiente en conocimiento de la Guardia Civil.

Según consta en la denuncia presentada por la mujer que lleva desde hace doce años la dotación municipal, la alcaldesa se presentó el jueves de la pasada semana por la mañana y solicitó la documentación del negocio a lo que le respondió «que ya sabía que no lo tenía y que se hallaba en el Consistorio». Tras ello, le pidió que «ya que el almacén era también del Ayuntamiento que lo abriese».

Tras preguntarle el motivo por el cuál quería ver lo que se encontraba en el interior según relató a  los agentes, le comunicó que «porque era la alcaldesa». La denunciante, María José Caballos Ramos, le respondió que «tenía sus cosas en el interior y no le abría». También sostiene que «en ningún momento me dijo el motivo de la inspección ni tampoco presentó ningún escrito que avalase su actuación».

Sigue narrando que «tras llamar  la edil por teléfono a los pocos minutos se presentó otro concejal y luego se acercó un operario para reventar la puerta del almacén». Tras su apertura «mandó al vigilante que la acompañaba que fotografiase todo lo que había en el interior».  Según trasladó Caballos a los agentes de la Benemérita: «le dije que como se iba a quedar la puerta abierta por lo que la regidora mandó colocar un candado y me entregó una llave, quedándose las otras en propiedad del Consistorio».

La alcaldesa, María Francisca Peña, ha explicado que el negocio se encuentra en una «situación de ilegalidad, pues  no tiene ni contrato, ni cesión ni acuerdo para llevarlo; y  los gastos de luz y agua los paga el Ayuntamiento».

Sobre la razón por la que accedió al almacén sostiene que «hemos recibido en el Consistorio varias quejas y queríamos ver lo que había dentro».

También explica que acudió al establecimiento para «intentar solucionar el problema y por ver si tenía algún documento con el que pudiese acreditar la concesión del negocio». Añade que en  la Casa Consistorial se disponía de una llave de todos los locales municipales «excepto de la de ese almacén».

Finalmente dice que «si hay algún problema, el Ayuntamiento es el último responsable al ser un local municipal. No tenemos nada en su contra, lo que queremos es que esté todo en regla».