El Consistorio de Barruelo de Santullán podría tener en breve la Auditoría que había solicitado en verano con el fin de clarificar las cuentas de los últimos ejercicios que han llevado a que actualmente tenga una deuda de 2,3 millones de euros.
El diputado de IU, Félix Iglesias, y su concejal barruelano, Igor Piélagos, se reunieron recientemente con el vicepresidente del Consejo de Cuentas y varios de sus integrantes con el fin de ver en qué situación se encontraba la solicitud de la Auditoría, pedida por unanimidad en un pleno el pasado mes de agosto.
«Veíamos que el Consistorio estaba en una situación de desgobierno financiero, y ahora se ha solicitado además un crédito de 200.000 euros para hacer frente a algunas deudas importantes con los suministradores de servicios», asegura Iglesias.
Por ello solicitaron el encuentro con los responsables del Consejo de Cuentas que según apunta les han asegurado que la Auditoría se realizará de forma inmediata. «Falta la aprobación de las Cortes Regionales, pero nos han dicho que no habrá problema. Tras ello se enviará un grupo de técnicos a Barruelo para que encarguen de fiscalizar la deuda», comenta.
Sostiene que se investigará desde el 2007, «ejercicio en el que ya no se presentó el Presupuesto, y se derivarán todas las responsabilidades fiscales y penales que correspondan». Además avanza que también se incluirá en esa revisión a la Mancomunidad El Carmen.
Quiere dejar claro el diputado de IU que «la Auditoría no tiene nada que ver con una intervención, pues eso ya dependería del Ministerio de Hacienda».
Hay que recordar que el grupo ya advirtió a finales del mes de abril de la grave situación económica que atravesaba el municipio del valle de Santullán, precisamente tras solicitar información al Consejo de Cuentas. Entre los datos que les facilitaron desde el órgano regional estaba que el Ayuntamiento llevaba sin presentar las cuentas desde hacía ocho años.
Además, el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas les informó que desde el ejercicio de 2011 no se percibían los fondos de Participación de Ingresos del Estado (PIE), que en el caso de Barruelo son de 30.000 euros anuales.