El palista palentino Diego Cosgaya, acompañado por el balear Marcus Cooper, ha competido durante este mes de mayo en dos grandes citas internacionales en su prueba del k-2 de los 1.000 metros, un Campeonato de Europa y una Copa del Mundo, con sendos puestos de finalista y una sensación agridulce en ambos casos.
El dúo acudía el primer fin de semana del mes a tierras checas, para tomar parte en el Campeonato de Europa de Racice. Una cita en la que se clasificaban con brillantez para la gran final, al ganar su serie eliminatoria con autoridad. Se evitaban de esa manera el paso por las semifinales.
Sin embargo, al día siguiente no encontraban su ritmo adecuado de palada y al final de los 1.000 metros no pasaron de la octava plaza. Lo peor no fue la octava posición en una cita de la importancia de una competición continental, sino la sensación de no haber alcanzado sus máximas prestaciones. Lo mejor, el margen de mejora mostrado en la eliminatoria, cuando sí apareció el fruto de su trabajo y el talento de la pareja.
Dos semanas más tarde en Portugal (Montemor-O-Velho), el escenario en el que se disputaba la primera prueba de la Copa del Mundo de este año. De tú a tú, incluso dejándose ir en los últimos metros, el dúo español luchaba con la pareja australiana, una de las grandes del panorama mundial. Se clasificaban de nuevo de forma directa para la final. Y allí les sucedía de nuevo lo mismo, esta vez acabando en la sexta posición, sin acabar de rendir en la medida de sus posibilidades. Circunstancias para aprender de cara al futuro.
Ahora (30 y 31 de mayo)acudirán a la Copa de España de 200 y 500 metros en Verducido (Pontevedra), donde al margen de tomar parte en la cita como embarcaciones individuales, el k-2 que ambos comparten competirá en el selectivo del k-2 500 para el Campeonato del Mundo. Sin embargo, la plaza para el Mundial de Milán (donde se reparten las plazas para Río) del k-2 1.000, la que realmente importa, al ser distancia olímpica, aún está en el aire. Diego ya se quedó sin ir a los Juegos de Pekín tras lograr la plaza.