Conciliar la vida profesional y la familiar parece complicado en la actualidad de muchas mujeres. Y es que un 47 por ciento de las madres españolas cree que no es fácil equilibrar las tareas personales con las laborales debido a que se espera de ellas que escojan una opción sobre la otra, según se desprende del análisis publicado ayer Informe Global sobre Madres, realizado en el marco de la campaña Gracias Mamá, basada en la investigación que la firma P&G y sus compañías hacen para crear los mejores productos.
Asimismo, el estudio señala que un 77 por ciento de las progenitoras asegura estar haciendo un excelente trabajo con sus hijos y que un 36 por ciento, a pesar de las dificultades, indica que es cada vez más fácil encontrar el «punto perfecto» debido a horarios «más flexibles». Otro 14 por ciento reitera haber logrado un equilibrio al delegar responsabilidades en otros miembros de la familia.
Con respecto a la conciliación, mientras que un 41 por ciento de madres españolas confirma tener una persona que le ayude con las tareas diarias, una de cada tres asevera que no cuenta con nadie y realiza sola los quehaceres cotidianos y las actividades relacionadas con sus hijos.
No obstante, del total de aquellas que tienen ayuda, el 85 por ciento asegura seguir siendo la que lidera la familia. En España, el 59 por ciento de las mujeres con descendencia atestigua poder dedicarse a ella misma solo una hora diaria, mientras el 44 por ciento, emplea entre tres y seis horas a sus hijos y un 33 por ciento lo hace durante más de siete.
Dicho informe, que ha contado con la participación de más de 1.000 participantes nacionales, recoge que entre las múltiples cualidades que han tenido que desarrollar las madres al tener hijos, la fuerza emocional (52 por ciento) y la paciencia (80 por ciento) son dos de las principales. Asimismo, estas mismas características son las que han aprendido a apreciar más en sus propias progenitoras. La fuerza emocional (26 por ciento), junto a la empatía (35 por ciento) y la integridad (29 por ciento), también son valores importantes que dicen querer inculcar a los suyos.
Igualmente, del documento se desprende que el 86 por ciento de féminas quiere que sus descendientes sientan que están presentes aún cuando no pueden estar juntos. Además, un 67 por ciento considera que es más importante proporcionar buen ejemplo que estar involucrada en cada aspecto diario de su educación y cuidado.
Por otro lado, después de convertirse en madres, éstas pasan a valorar más a las suyas, reconociendo principalmente tres habilidades: la paciencia, la empatía y la fuerza emocional.