Revenga apuesta por las verbenas de calidad

PAULA NICOLÁS
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La localidad terracampina abre sus puertas a aquellos que buscan diversión y buen ambiente. Todo está preparado para llevar a cabo unas fiestas llenas de actividades

Jóvenes de Revenga disfrutan de las fiestas del año pasado. - Foto: DP

Un año más Revenga  se llena de actividades durante las Fiestas de San Lorenzo. Como viene siendo tradición no faltará la buena música, pues desde el jueves hasta el domingo el pueblo va a recibir orquestas y disco móviles. Además todas las mañanas y tardes un pasacalles recorrerá la localidad.

La crisis económica ha afectado directamente en el número de verbenas que actuarán, serán dos. El alcalde Felicísimo García ha reconocido que «son unos grupos muy buenos, hemos reducido en cantidad pero nos hemos centrado en la calidad».

Para los vecinos y forasteros más madrugadores, todos  los días desde las 10 de la mañana, habrá una degustación de sopas de ajo, y por la tarde podrán quemar las energías en los campeonatos de futbito, baloncesto y frontón o gymkhanas.

Además, los más pequeños disfrutarán de juegos infantiles y recreativos. «Como novedad los pequeños disfrutarán de un recorrido por el pueblo en bus, en vez de en tren como otras veces», señala el alcalde. Otra de las actividades que Revenga acogerá por primera vez será una hermandad entre las peñas y las asociaciones, «se juntarán para hacer una merienda cena», explica Felicísimo García.

Las  peñas y asociaciones  se encargan siempre de organizar el programa, «el Ayuntamiento pone la orquesta y las actividades para niños, pero del resto se encargan ellos», asegura el alcalde.

Felicísimo García asegura que Revenga «suele estar muy concurrido sobre todo el viernes y el sábado» y anima a todos los vecinos y peregrinos a que «vengan todas las mañanas a comer sopas de ajo y a que disfruten de las verbenas por la noche, de las que resalto su calidad», pero añade que «esperamos que no se vuelvan a repetir los actos vandálicos que han venido ocurriendo el año pasado o el día de Santiago de este verano», cuando varios jóvenes rompieron las jardineras de la plaza y las farolas del pueblo.