Javier Fernández sueña con alcanzar la gloria olímpica

AGENCIAS
-

El madrileño considera que si se prepara bien durante estos tres años, tiene en su mano conquistar el oro

Aunque su nombre ya está escrito con letras de oro en la Historia del deporte español, el patinador Javier Fernández aún quiere más. De hecho, tiene claro su próximo objetivo: conseguir una medalla olímpica en Pyeongchang en 2018.

«Ser campeón olímpico es a lo más alto que puedes llegar. Los Juegos son el gran sueño, y, realmente, quiero una medalla. Trabajaré para el oro, pero no sé si lo conseguiré. Va a ser duro, pero creo que está en mi mano, si me preparo bien estos tres años y al mismo ritmo se puede conseguir», aseguró el madrileño en los Desayunos Deportivos de Europa Press, patrocinados por Repsol, LAE y Liberbank.

Sobre su gran éxito de hace un mes en Shanghai, confesó que tuvo «una sensación extraña» cuando se dio cuenta que era campeón del mundo: «No te lo llegas a creer. Cuando te pones una meta y la consigues estás orgulloso, pero cuando es un sueño y lo logras, necesitas tiempo para creértelo y es lo que me pasó a mí».

 «En el Programa Largo había quedado segundo, pero cuando lo juntaron con el Corto me vi primero y me vino más de sorpresa. No me acordaba y lo tuve que ver en vídeo», rememoró con una sonrisa. En el Mundial, durante el Largo, tuvo un pequeño error, pero el patinador español advirtió de que cuando compiten de lo que están «asustados es de hacer un mal programa» y no de caerse. «Es lo que nos pone más nerviosos, en cuatro minutos nos lo jugamos todo», indicó.

 Además, el triple campeón de Europa confesó que vivió un momento de duda tras ganar el oro mundial, ya que no tenía claro qué camino debía seguir tras alcanzar el éxito con el que tantas veces había soñado. . «Me dije: ‘Ahora qué pasa, qué tengo que hacer. Seguir patinando, dejarlo,...’ No sabía lo que iba a pasar», apuntó.

Lo que parece tener claro es que volverá a España «en un futuro», pero no cree que sea hasta que «acabe» su carrera y con el objetivo de ser entrenador y de «crear una nueva escuela para sacar nuevos talentos», y mostrándose «disponible a ayudar en todo», aunque esté en Canadá, una opción que le «fortaleció».

El campeón del mundo recordó que los patinadores «llegan a lo mejor de su carrera a los 27 ó 28 años», aunque haya «excepciones como Plushenko». «No sé hasta que punto llegaré y después quiero ser entrenador, lo tengo claro desde pequeño. A mí me gusta España y si tengo un sitio decente y puedo empezar a crear una escuela vendré, pero también tengo una novia japonesa y nunca se sabe», expresó entre risas. El madrileño insistió en que quieren que su deporte «cambie» en el país y que tenga «más pistas». «Es un poco más caro, pero lo podemos conseguir. Granada tiene una nueva y la van a dejar, Barcelona ha montado una y tiene en mente otra. Para nosotros esto es mucho. Se puede hacer más porque hay ciudades grandes en España que no tienen la oportunidad», admitió.

Fernández es consciente de que su deporte es «nuevo» y de «lo complicado» que es darle a conocer: «Lo único que podemos hacer es que vaya creciendo poco a poco y que tengamos más pistas. Necesitamos evolucionarlo. Si seguimos como estamos ahora mismo, ojalá que puedan salir más deportistas que ganen medallas internacionalmente. Por eso, creo que cada éxito que tengo es una oportunidad para que se animen y aporten económicamente»: