Crear arte quemando madera es algo que no es muy habitual. Se trata de llevar a cabo un dificultoso proceso mediante una técnica, que pocos artistas utilizan, pero que da como resultado unas bellas obras.
El pirograbado consiste en mediante un dispositivo - pirograbador- ir haciendo pequeñas muescas a través de una especie de lapiceros; que mediante un transformador y corriente eléctrica, van quemando poco a poco la madera creando unas tonalidades oscuras para dar como resultado final un bello dibujo.
Uno de esos pocos que lo practican en la zona Norte de nuestra provincia es Alberto Izquierdo Estébanez. Su familia es de Barruelo y Cabria, y aunque debido al trabajo de sus progenitores nació en Vitoria reside desde su infancia en Camesa, perteneciente al municipio de Aguilar.
Durante toda su vida se ha dedicado a la carpintería, pero tras jubilarse por motivos de salud, decidió practicar la disciplina artística de forma más intensa. «Dibujar he dibujado siempre, pero pintar no se me da bien pues siempre he dicho que no sé mezclar los colores. Sí que había realizado cuadros a carboncillo pero hace doce años visitando una muestra en Cantabria conocí a un artista de pirograbados y quise hacer lo mismo», indica.
Aprendió de forma autodidacta, «primero probé con un estañador y luego adquirí el pirograbor. Se pone la punta de las agujas al rojo vivo y con ello, y según el grosor, se va haciendo la obra». Primero hace un dibujo, lo pasa a la madera mediante un lápiz y posteriormente hace el pirograbado que le suele llevar una semana.
Siempre reproduce animales de la zona pues es amante de la fauna y juez internacional de morfología para seis razas de canes -braco alemán, perro perdiguero de Burgos, drahthaar, bretón, perro de agua español y podenco ibicenco-, incluso ha presidido el Club Español de Amigos del Perro Perdiguero de Burgos.
Sus trabajos se pueden ver en la sala de exposiciones de la Biblioteca Bernardo El Carpio de la villa galletera. En la muestra hay cuadros de diversos animales, sobre todo perros -ha incluido uno de raza no autóctona, que representa al chihuahua de su hija- y caballos. Todos ellos en maderas con vetas: alistonado de abeto, rechapado de pino, fresno y mukali.
«Me habían pedido algunos encargos que no había aceptado hasta ahora pues quería ver primero si a la gente le parecía adecuado lo que hago», confiesa. Y ha gustado pues ya ha vendido algunas piezas e incluso le han ofrecido otras salas para exponer.
Fecha y horario
Hasta el 14 de abril. La muestra está ubicada en la sala de exposiciones de la Biblioteca aguilarense hasta el próximo 14 de abril.
De lunes a viernes. Se puede visitar en días laborables en el horario del centro documental, de 11 a 13 y de 16 a 21 horas.
Dibujos de animales
Especies autóctonas. Se trata de una original exposición de cuadros, en madera en los que se representan: cinco caballos, cinco perros, una vaca, una perdiz, un jabalí, un ciervo, una corza, un lobo y una víbora. Las obras están a la venta con un precio que va desde los 100 hasta los 180 euros.