UGT, CCOO, PSOE, Podemos e IU acercaron esta mañana el pacto fiscal firmado el pasado mes de julio que persigue la recuperación del estado del bienestar con una recuperación de los ingresos en las arcas regionales.

Julián Martínez, secretario provincial de UGT, recordó que para los sindicatos este acuerdo, al que no se han sumado PP, ni Cs ni UPL, era “necesario y urgente” porque han detectado un recorte progresivo de ingresos en la región y esto “solo puede suponer una pérdida de derechos y del estado del bienestar” y por eso se lo trasladaron a las fuerzas políticas presentes en las Cortes.

“En su momento ya hubo un pacto de Comunidad para tener una postura común de cara al nuevo modelo de financiación económica pero, en coherencia con ello, necesitamos que haya un nuevo modelo fiscal más progresivo, más justo que garantice los ingresos suficientes para revertir los recortes que ha sufrido la sanidad, la educación y los servicios sociales”, detalló Martínez.

CCOO y UGT trasladaron a los partidos políticos con representación en las Cortes y respaldaron este pacto PSOE, Izquierda Unida y Podemos. “lamentar que PP, Cs y UPL no quisieran adherirse, entendemos que tienen su propio modelo social y económico, pero hay que avanzar”, por lo que deseó un gobierno elegido en las próximas elecciones autónomicas que quiera sacar adelante este pacto.

Para Luis González, secretario provincial de CCOO, esta pacto “por primera vez, coge al toro por los cuernos” porque pone el foco sobre el problema “que no está en los gastos, sino en los ingresos”. Para González, no se puede continuar seguir con unas políticas de reducción de ingresos “porque es incompatible reducir ingresos y querer mantener el estado del bienestar como está”, por lo que defendió la recuperación de los ingresos y volver a tener unos servicios sociales de calidad.
La propuesta pasa porque “aquel que más tiene más aporte”, incluidas las empresas y, para evitar el fraude, reclaman más inspectores. González se mostró convencido de que si se lucha contra el fraude, el dinero que afloraría en Castilla y León permitiría recuperar los servicios perdidos.

Por su parte, el procurador socialista, Jesús Guerrero, explicó que con la firma de este pacto fiscal se busca “blindar” los servicios sociales que la Comunidad debe prestar. Guerrero aseguró no se pone el dinero suficiente para prestar unos servicios de calidad y para ello hace falta una reforma fiscal. “Faltan 2.000 millones de euros a los 10.000 millones de presupuesto que tiene la Comunidad para cubrir los servicios sociales y este pacto lo garantiza, porque significa que los que más tienen, más ganan y más heredan pagan más en beneficio de reducir las desigualdades de nuestra tierra”.

El PSOE lo llevará en su programa electoral y los ciudadanos en las elecciones de mayo decidirán si optan por “más servicios sociales u por mantener un modelo de liberalismo y de recortes del PP durante estos años”.

Ricardo López, de Podemos, criticó que “los que más tienen paguen menos” y aseveró que Castilla León “es la comunidad autónoma, después de Madrid, que menos grava las rentas más altas”. “Con esta reforma fiscal se cumple un mandato de la propia Constitución que habla de un modelo fiscal progresivo que va a ayudar a la provincia de Palencia para que haya más servicios públicos y que esto se fortalezcan ya que ahora están bastante esquilmados por parte del PP”.

Por último, Félix Iglesias, de IU, aseguró que “adelgazar de ingresos la administración repercute en una falta de calidad de los servicios y afecta a las clases populares y trabajadores”. Para Iglesias “mientras las clases altas pueden pagarse los privados, las trabajadores dependemos de estos servicios”.